Cuando todo hacía pensar que sería una serie aburrida y con olor a barrida, los Celtics sacaron ese orgullo que los caracteriza y dieron una muestra increíble de caracter: superaron 111-108 a Cleveland como visitante con Bradley como héroe. Le cortó una racha de 10 triunfos consecutivos a los de Lebron en postemporada y le puso suspenso a una serie que lucía despareja. Los de Stevens tienen doble mérito, ya que lo lograron sin su máxima figura, Isaiah Thomas.
Los Cavs llegaron a estar arriba en el marcador por 21 puntos (77-56) en el tercer cuarto, pero se durmió y Boston aprovechó cada una de las oportunidades. Smart se lució detrás del perímetro y en un pequeño lapso se puso por debajo 80-70. Cuando restaban 4 minutos, Horford con un buen doble lo puso arriba a los verdes 99-98 y así fue palo y palo hasta el final. Los locales fueron muy poco inteligentes, ya que contaron con una noche olvidable de sus máximas estrellas, en especial LeBron James.
Los Celtics tuvieron más resto y mas hambre para ganar el partido. Todo eso se coronó con un bombazo de Bradley que estampó el 111-108 final. El alero salió increíblemente desmarcado y la pelota entró con suspenso. Ahora, sueñan con dar vuelta esta dificil serie. Por su parte, Cleveland tendrá que pasar rápido la página sabiendo que aún tiene la ventaja y que es factible que pase. Pero tuvo desatenciones que no se le pueden permitir al campeón.
Flavio Ariel Ibarra
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