• 19-03-2024
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La teología de Milos

Hay jugadores que merecen religiones y Milos parece ser uno de ellos. Pases de faja, de un aro a otro y caños por doquier son algunas de las técnicas capaces de convertir a cualquier pagano del básquet en creyente del deporte. El base de los Clippers está tomando el mundo NBA por los pelos y sacudiéndolo a su antojo ¿Lo más curioso de todo? Nadie lo está viendo venir.

Su entrada al mundo norteamericano se hizo esperar bastante. Desde sus primeros pasos en Serbia hasta su campeonato europeo con el CSKA de Moscú, el balcánico estuvo en la mira del otro continente. Inclusive, en los Juegos Olímpicos de Brasil volvió locos a los bases norteamericanos, que no sabían cómo frenarlo. Un jugador hecho como el ron y la coca para la NBA.

Buena altura (1,96 metros), largos brazos y sobre todo un coeficiente baloncecístico privilegiado son las principales armas de un jugador creado en la escuela de la vieja Yugoslavia. En momentos en que se viene tratando de descubrir las metodologías del baloncesto de la región balcánica, el base expone todo lo bueno de aquel proyecto. Jugadores completos con buen tiro exterior, habilidad para pasar el balón y solidaridad ante todo, son las bases de un colegio que sigue dando de comer al básquet mundial con sus jugadores semi robóticos.

Sacando su defensa, es difícil encontrar un punto débil a Teodosic y, como el Gran Hermano de Orwell, sus ojos todo lo ven. El serbio es uno de esos jugadores que siempre están una jugada (o dos... o tres) adelantados al resto y su visión milimétrica le permitió dominar la cancha desde que a los tres años sus padres le pusieron una pelota de básquet en la cuna.

A partir de las dos torres gemelas DeAndre Jordan y Blake Griffin, Teodosic está haciéndose un festín en la duela. Sus asistencias ya comenzaron a sobrecargar las redes sociales y, seguramente, pasará lo mismo en los top 10 semanales una vez que empiece la liga. Con la ida de Chris Paul a los Rockets, Milos contará con todo el protagonismo para encargarse de la organización de Clippers en el rectángulo de juego. “Teodosic es uno de los mejores con los que he jugado. No entiendo nada de lo que dice, pero da asistencias increíbles”, dijo DeAndre hace unos días.

La ofensiva de pick and roll central le viene como anillo al dedo a un Teodosic que a partir de allí frotará la lámpara para penetrar, dar el pase al interno o descargar a los tiradores para que liquiden. La temporada pasada los angelinos sufrieron por el desorden y la voz de Milos será fundamental para organizar todo de nuevo. El serbio será la voz de Rivers en la cancha y la conexión con las torres gemelas ya le está dando muchos réditos.

Además, donde podrá sacar el jugo será corriendo en transición. El base no necesita mucho tiempo con el balón y en contraataque tendrá mucha facilidad para encontrar a sus compañeros. Si bien no es un base veloz de piernas, su cabeza es más rápida que la de cualquiera y es allí donde generará estragos a las defensas rivales.

Sin embargo, uno de sus puntos que hace dudar a los especialistas norteamericanos es su displicente defensa, en la cual muchas veces elige cortar las jugadas con faltas o, directamente, dejar pasar al jugador hacia el aro. Además, comete muchas distracciones en las ayudas y no parece tener mucho interés por destacarse en ese costado.

En la mejor liga del mundo es muy difícil que algún jugador sobreviva sin buena defensa, sobre todo un base. Por esto, no quedan dudas de que Teodosic tratará de mejorar en ese aspecto. A su lado está Doc Rivers, el entrenador especialista defensivo, junto con Patrick Beverly, un base conocido por ser un perro de presa a la hora de marcar. Seguramente, con estos laderos el europeo aprenderá mucho y podrá dejar de lado las dudas.

La historia recién empieza y el Dios de Europa está listo para convertir a los paganos de su juego. Pases excéntricos, jugadas lujosas y mucho pero mucho espectáculo son las armas que usará Milos para implementar su religión en el Nuevo Continente. Como dijo Samuel en la Biblia: “Hemos aprendido que no hay nadie como tú, y que aparte de ti no hay Dios”.

Nacho Miranda

@magicjohn92

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