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¿Como nos afecta la suspensión Olímpica?

Una noticia que impactó en el mundo deportivo pero con su lógica por la situación crítica a nivel sanidad como la suspensión de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Se mantendrán como tal, pero en el verano japonés del 2021 como ya establecieron desde el COI junto al primero ministro del país anfitrión en las primeras horas del martes. A todo esto la mayoría de los elencos clasificados dentro del basquet, y uno de ellos Argentina. Ahora bien... ¿Como nos afecta esta resolución? ¿Nos cae bien o mal?

Sergio Hernandez ya tiene una lista conformada y la mayoría de los juegos alineados. Seguramente contará con algunas dudas en el puesto de escolta y como cuatro abierto pero el resto casi confirmado. La actuación brillante en el mundial, junto a algunas apariciones además de confirmaciones a nivel clubes mostraron un elenco compacto y con nombres que salen de memoria. Ahora bien, sucedieron cuestiones en el camino que, en caso de haberse jugado Tokio 2020 hubiesen cambiado la estructura como equipo.

¿A que nos referimos? Puntualmente las lesiones de Luca Vildoza (hombro) y Patricio Garino (rodilla) además de tener entre algodones a Gabriel Deck en los últimos juegos con el Madrid. Tres jugadores de enorme calidad y suma importancia dentro del roster albiceleste, y hasta diría irremplazables por el momento. En el caso de Vildoza, una lesión en el hombro que arrancó en el cierre del 2019 y reapareció por la Euroliga en un juego en Moscu ante CSKA lo cual lo llevó a operarse con éxito.

Ni hablar lo de Garino, quien se rompió el ligamento anterior cruzado de su rodilla derecha lo cual ya hacía dudar su participación en Tokio. La realidad es que hoy no hay un jugador que pueda reemplazar a Garino por su formato de juego e intensidad defensiva. Gabriel Deck sufrió un esguince de tobillo a principio de año que lo llevó a detener su actividad de dos a tres semanas. Es decir, muy malas noticias para conformar el equipo.

La pregunta es rigor es... ¿Y Scola? El capitán de la selección dejó en claro que el hecho de haber clasificado a los Juegos Olímpicos fue el factor determinante para continuar su carrera. Al conseguirlo en el mundial dejó China para jugar en un equipo de elite con competencia de calidad y lo consiguió en el Olimpia Milano con Ettore Messina en la banca. Nada hace pensar que se retirará antes de tiempo, pero su vida basquetbolística parece se extenderá un año más pensando en jugar en Tokio, algo de los cual seguramente no cambiará su opinión más allá de la postergación ya oficializada.

¿Y el resto? Si consideramos que Sergio Hernandez llamaría los mismo jugadores, solo Laprovittola (31 años en el 2021) y Campazzo (30 años) serían los más grandes junto a los 41 abriles de Scola. Ambos bases sosteniéndose en el Real Madrid, para Laprovittola con otro año de experiencia y Campazzo como mayor líder del conjunto de Laso. Los demás jugadores se sostendrían en un promedio de 25/26 años además de los 23 de Fjellerup el año entrante. Esperar la consolidación de Brussino en su mejor momento individual en Europa con Zaragoza.

Ni hablemos si Bolmaro aparece en escena con 21 años cumplidos, minutos en la Liga Endesa o bien un posible draft de la NBA. Lo propio para Francisco Caffaro con otro año más en la NCAA y también 21 años. Será cuestión de ver el desempeño de los internos luego de la vuelta de Acuña para las eliminatorias, además de Gallizzi como moneda corriente, Agustín Caffaro si logra consolidarse y Marcos Delia como referente en esa posición para la selección.

Sergio Hernandez y sus asistentes tendrá mayor tiempo para resolver otras cuestiones como el cuatro abierto, otro escolta más y la evolución física de sus pilares. En definitiva una postergación que no vino mal más allá del excelente nivel presente para su media cancha y Scola en su plenitud tras el mundial realizado. Servirá para pulir ciertas cuestiones como equipo, algunos nombres para delinear y de ahí regresar aún mejores para Tokio 2020 pero en 2021.