• 29-03-2024
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Cantando bajo la lluvia

Los Lakers volvieron a sonreír. Vencieron a los Houston Rockets por 117 a 109 y empataron la semifinal de conferencia a un juego por bando. Durante el primer tiempo dominaron gracias a una gran defensa, pero en el segundo sufrieron la enorme eficacia de los texanos a lagar distancia.

Luego des ese fatídico tercer cuarto, los de California lograron retomar las riendas del partido e imponer su estilo. LeBron James terminó la noche con 28 puntos, 11 rebotes, 9 asistencias, 4 recuperos y 7 robos, mientras que Anthony Davis lideró a L.A con 34 tantos y 10 tableros. Rajon Rondo tuvo un gran partido con 10 puntos, 9 asistencias y 5 robos desde el banco.

Lo noche tuvo un comienzo frío y errático, con un ritmo que no por acelerado era vistoso. Houston imprimía la velocidad, dominaba los tableros ajenos (3 ofensivos) pero no lograba capitalizar (2/10 de cancha). Los Lakers buscaron desde un principio hacer uso de la superioridad de talla con Anthony Davis, y con ocho puntos de su pivot pasaron del 0-4 inicial al 8-6 en la marca de 6:34.

El equipo de Frank Vogel hería a su rival con Davis, que tenía más goles de campo (5) que todos los Rockets juntos (3/12), mientras que en el costado defensivo se mostraba muy intenso en la primera línea y en las ayudas. Con tres triples seguidos de Morris sacaron una máxima de 33-17, y con una cuarta bomba por parte de Rajon Rondo se fueron al primer descanso arriba 36-20.

La defensa angelina no aflojó en el comienzo del segundo cuarto; cortando en primera línea y corriendo abultaron la mayor distancia (42-21). Houston estaba pálido basquebolísticamente, sin encontrar tiros cómodos ni fluidez en sus ataques.

Luego de alcanzar la máxima de 42-21 los Lakers empezaron a sentir el tremendo esfuerzo realizado; bajaron la guardia y Houston, con P-J Tucker como bandera (6), metió una ráfaga de 10-2 para acercarse 31-44 a 7:29 del entretiempo.

Mientras Houston se mantenía con los triples de Eric Gordon (4 en el cuarto) los Lakers iban a reaccionar con un parcial de 9-0. De esta manera estiraron la brecha a 60-42 para volver a respirar más aliviado, e irse al vestuario arriba 67-51.

El tercer cuarto fue una isla dentro del partido. Houston lo ganó 41-23 con 9/13 en triples. En el arranque llegaron tres consecutivos sin respuesta. Primero Gordon hundió dos, y luego fue Tucker el que obligó a Vogel a parar el juego en busca de reacomodar las ideas (60-67).

Houston mejoró desde la increíble puntería a larga distancia, pero también atacando mejor ante la doble marca sobre Harden, más una mayor concentración a nivel defensivo sin dejarle llegar la bola tan fácil a Davis.

El equipo angelino logró volver a hacer pie tras un doble de Davis (su primer disparo al aro del cuarto) y una posterior perdida de los Rockets a manos de Rondo. De todas formas Houston terminó ganando 92-90 al final del período.

En el cuarto segmento LeBron y sus Lakers salieron con la idea en mente de volver a atacar el corazón de la pintura rival. El “Rey” comenzó a ir para adentro con mucha potencia, luego Rondo acertó a media distancia y el propio James bajó un alley-oop que le devolvió a los californianos una pequeña ventaja de 98-94.

Houston se enfrió (4/11), pero Tucker reencendió la llama con un triple para acercar 101-104. Sin embargo, aquella bomba del alero de los Rockets sería el último signo vital de los texanos; los Lakers volvieron a tomar las riendas del partido imponiendo su estilo, y apelando que la bola no estuviera en las manos de Harden, quien distribuía pero sus compañeros no encontraban el aro.

Los Ángeles, con un muy buen desempeño de Rondo, capitalizó un parcial de 9-0 para escaparse 113-101 y comenzar a sentenciar la historia, que tendrá su tercer capítulo mañana.

Sebastián Ciano
Twitter: @Seba_Ciano
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