“Estamos contentos de haber empezado con este resultado, fuera de casa y ante un rival duro. Tenemos que seguir por este camino”, reconoció Manu en la conferencia.
La figura del seleccionado, a pesar del desgaste, arrancó con todo en la búsqueda de su quinto título con los boloñeses. En 38 minutos sumó 6-12 dobles, 0-5 triples y 9-14 libres. Le cometieron 12 faltas, siete más que las promediadas en los 14 partidos de la primera fase, una cantidad que demuestra que los defensores todavía no encuentran la vuelta para secarlo.
En un choque siempre parejo, ante las 8.000 personas que llenaron el Abdi Ipekci Sports Hall en Estambul, los libres de Ginóbili sirvieron para sacar la diferencia. “Lo terminamos como lo empezamos. Efes hizo un gran esfuerzo para ganarlo. Pero en el último cuarto realizamos una buena defensa y pudimos inclinar la balanza”, explicó el goleador del campeón. El italiano Frosini (18), el australiano Andersen (11) y el esloveno Smodis (10) lo ayudaron.
Por otra parte, Leandro Palladino, operado a fines de noviembre de una rotura de ligamentos cruzados en la rodilla derecha, se instaló en la casa de su amigo Emanuel Ginóbili en Bologna para completar la recuperación. El Torito es tratado por Alessandro Lelli, el médico de Kinder, que le injertó un doble ligamento nuevo. Su regreso al Napoli de la segunda italiana, donde era figura hasta la lesión, va a llegar en un mes.
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