Comenzaron ayer las horas más agitadas y agotadoras que sufrirá el seleccionado argentino en su camino a los Juegos Olímpicos. Para algunos jugadores, la movida tendrá tintes simpáticos (o patéticos, según el caso), que les recordarán sus comienzos en el profesionalismo, cuando actuaban en la Liga Nacional y saltaban del hotel al estadio, jugaban, se duchaban y subían a un ómnibus para un viaje nocturno que resultaba más llevadero con la vianda a bordo.
Como en aquellos tiempos, las bolsitas con un sándwich, una tortilla, varias frutas, y un jugo o gaseosa, fueron repartidos anoche tras el partido con España, cuando los campeones olímpicos iniciaron su viaje a Nanjing, ciudad china donde disputarán, desde pasado mañana, la Copa Diamond Ball.
“Bueno, nos tratan como chicos de jardín de infantes”, sonrió el Chapu Nocioni, con la mejor onda y sin espíritu crítico. “Es algo muy común en la Liga de ellos. Cuando yo dirigía acá, el jefe de equipo pedía pizzas en un delivery y las traían a la puerta del ómnibus. Eso sí, después había que viajar y dormir con esa baranda a pizza”, acotó el DT Sergio Hernández.
La delegación cargó los bolsos en el ómnibus y dejó el hotel Auriense ayer, a las 18.15, para ir al estadio Paco Paz, a 7 km. Tras el encuentro con España, viajaron hasta Vigo (105 km); allí abordaron, a las 0.30, el avión chárter dispuesto por la federación local para volar a Madrid. De allí, tras descargar las maletas, todos se fueron a dormir (pasadas las 2 de la madrugada) en un hotel de Barajas. Para las 6.30 estaba programado el desayuno y la inmediata vuelta al aeropuerto para salir, a las 9.45, rumbo a Nanjing, previa escala de tres horas en Francfort.
En el aire, o llegando a esa ciudad mediterránea china, Emanuel Ginóbili cumplirá sus 31 años. Aunque, si se mide bien el tiempo, considerando las 11 horas menos respecto de la Argentina, el escolta de los Spurs, nacido a las 7.20 de un 28 de julio, en Bahía Blanca, el festejo podría postergarse hasta la tarde. “Siempre me pasa algo parecido. Los he cumplido en varias ciudades distintas estos últimos años por estar jugando en la selección”, señaló Manu, resignado. También su esposa, Many, que permanece en nuestro país, cumple años el mismo día. “Ja, se perdió el regalo”, acotó el bahiense. Y reflexionó: “No veo la hora de parar con los viajes y dejar de jugar en distintas ciudades. Quiero establecerme en la Villa Olímpica”.
La selección jugará el 29 con Irán, el 31 con Serbia, y el 1° disputará un cruce con uno de los integrantes del otro grupo (China, Australia o Angola), por el primero, tercero o quinto puesto. Una agenda intensa y agitada, que recién encontrará serenidad en la llegada a Pekín.
Como el ingreso en la Villa Olímpica está previsto para el 4 del mes próximo, es probable que se organice otro encuentro preparatorio en Nanjing para el día anterior. “Los organizadores chinos están buscando rival, pero todavía no tenemos confirmación”, señaló Germán Vaccaro, vicepresidente de la Confederación Argentina.
Nota: Miguel Romano – Diario La Nación
... 27/07/2008
federico kammerichz es igual a nicolas kifer el tennista
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