Se terminó, y la sensación de cuando una situación incómoda llega a su fin no es otra que alivio. Stephen Jackson logró su cometido y dejó de ser jugador de los Golden State Warrios, quienes lo enviaron junto a Acie Law a Charlotte a cambio del serbio Vladimir Radmanovic y Raja Bell.
Ambas partes tiraron de la cuerda hasta que ésta cedió. La relación de Jackson con su ahora ex entrenador Don Nelson ya no resistía ni un día más en San Francisco, y ahora cada cual continúa su camino: Los Warriors sacándose un peso - y un contrato grande - de encima, y el jugador apartándose de un mal clima y tratando de encontrar un equipo que estuviera de acuerdo con sus pretensiones.
Estos Bobcats de Larry Brown, a priori, parecen serlo. Jackson evaluó su situación económica: A su contrato todavía le quedan 3 años de vigencia y 27.700.000 dólares por cobrar, una traba para varios destinos que le fueron ofrecidos. Muchos equipos, como Cleveland por ejemplo, pedían llegar a un acuerdo para rescindir en contrato a final de la temporada, pero el jugador no tenía intenciones de resignar nada de lo que le correspondía.
Ahora los Bobcats lo esperan con los brazos abiertos a pesar de sus actos de indisciplina. Han adquirido a un jugador con experiencia y calidad, capaz de anotar y ser el líder dentro de la cancha. La 08/09 fue su mejor campaña en la NBA con promedios de 20.7 puntos, 5.1 rebotes y 6.5 asistencias en 59 partidos. Asimismo, en lo que va de la 09/10 (9 partidos) tuvo una media de 16.6 pts, 3.9 reb y 4.7 asisit en 33.3 minutos.
Si bien Charlotte comenzó la temporada en busca de su primera clasificación a los playoff, hasta el momento las cosas no les están saliendo del todo bien, y se encuentran anteúltimos en la división Southeast con récord de 3 ganados y 6 perdidos.
En Golden State las cosas no van mejor (3-6), y ahora es una especie de “barajar y dar de nuevo”. Raja Bell está en el último año de su contrato y hasta se duda de que pueda llegar a vestir la camiseta de los Warriors alguna vez, ya que padece un desgarro de un ligamento de su muñeca izquierda, por la que puede llegar a necesitar ser operado. Eso habla alas claras que el principal objetivo estaba cumplido, y que ambas partes quedaron satisfechas.
Foto: Gentileza NBA.com
Sebastián Ciano
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