Si bien expresaba Ibáñez, al síndico se le ha ido entregando dinero periódicamente, que no ha alcanzado para cubrir la deuda que se mantiene con el profesional y éste ha decidido dar este paso, para poder cobrar sus acreencias.
Recordemos que hace unos meses hubo conflicto por esta misma deuda y en esa oportunidad las partes se pusieron de acuerdo en un cronograma de pagos, que según palabras de Guillermo Torres se cumplió en parte: “Me entregaron pequeños montos durante los meses de enero y febrero, a partir de allí debían cancelar una suma importante, de la cual me entregaron algunos cheques que fueron rechazados. A raíz de esto y debido al incumplimiento, decidí embargar los derechos de televisación”.
Consultado el profesional acerca de la suma adeudada, expresó: “El dinero que se me deben es por casi la totalidad de los honorarios, son alrededor de 30.000 pesos, el club tiene una suma importante que cobrar y de allí podré hacerme de lo que me corresponde”.
Más adelante le solicitamos una opinión del futuro de la institución, en virtud de la situación en que se encuentra, refiriéndose en estos términos: “Obviamente la situación es complicada, aunque la nueva ley le ha otorgado un año más de gracia, pero los dirigentes deberán recurrir al overol y no volver hacer más de lo mismo”.
Fuente: La Reforma
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