Por mucho que los jugadores se empeñasen en declarar una y mil veces que el enfrentamiento era un amistoso, de paz y cordialidad tuvo poco. Ambos equipos se emplearon a fondo (Kobe Bryant jugó 25 minutos y forzó hasta el final) con sus mejores armas y con ese punto de agresividad y bronca que sólo es propio de un encuentro oficial donde sí importa ganar. De eso se encargó de demostrar Ron Artest, seguramente el jugador que más se aleja del glamour de Los Angeles Lakers. Un tipo que puede comenzar un séptimo partido de una final NBA forzando una técnica y el único que es capaz de pelearse con todos y cada uno de los rivales en un encuentro de pretemporada. Sin duda que Artest fue el encargado de poner la sal y la pimienta al choque, la calidad se la dejó a Pau Gasol y Juan Carlos Navarro (25 puntos y seis asistencias).
Los dos amigos que tantas veces se conjugaron para conseguir épicas victorias con el FC Barcelona y la selección española vivieron la extraña sensación de enfrentarse el uno contra el otro. Pau los hizo con la motivación de hacerlo en lo que fue su casa durante tantos años y la emotividad con la que se empleó (16 puntos antes del descanso 25 al final) fue lo más destacado de su equipo. Para Juan Carlos Navarro no había mayor motivación que la de ganar al campeón de la NBA y demostrar que su talento no tiene frontera.
El escolta fue el hombre que tiró del carro cuando el partido comenzó frío y luego dejó el relevo a Pete Mickeal (sublime en la segunda parte con 16 puntos para un total de 26 y13 rebotes) para que apareciera como suele hacer, en las grandes ocasiones y remontara un partido que se puso muy cuesta arriba cuando los Lakers se fueron 11 arriba (49-60). Sin embargo, como las grandes estrellas, Navarro volvió a aparecer en el inicio de último cuarto para, con siete puntos seguidos, encauzar un triunfo histórico. Puede ser que no haya título alguno que acredite la hazaña conseguida esta noche, pero en el recuerdo de todos los presentes permanecerá la noche en la que el Regal FC Barcelona derrotó al campeón de la NBA.
Gasol y Navarro provocan aplausos, Artest pitos
El partido comenzó mucho antes del salto inicial, concretamente en el momento de las presentaciones. El público se ponía en pie para aplaudir a los titulares de Los Angeles Lakers y Pau Gasol y Kobe Bryant competían por el cariño de la afición desplazada aunque era Juan Carlos Navarro quien más aplausos arrancaba en la espectacular puesta escena del partido.
El partido comenzaba con mucho amor en la grada pero no en la pista; en menos de un minuto Pete Mickeal caía en la provocación de Ron Artest y tras un forcejeo el alero blaugrana se llevó una técnica. El jugador angelino comenzaba marcando el territorio, de la misma forma que tuvo en el séptimo partido de la pasada final contra Boston Celtics. Estaba claro que para los Lakers podía ser un partido de pretemporada pero no una amistoso cualquiera y eso también lo percibió la grada. Aunque el color amarillo era predominante entre los asistentes al partido, estaba claro que aquella acción no era del agrado del aficionado y pronto el indeciso tomó parte a favor del Regal FC Barcelona empujándolo en un frío comienzo donde los fallos en el triple de Ricky Rubio y Terence Morris eran castigados por los Lakers a través de la línea de tiros libres (4-10).
Estaba claro que el equipo necesitaba calentar y quien mejor que Juan Carlos Navarro para hacerlo. Los locales habían comenzado descentrados por las protesta pero una canasta de dos y un triple del escolta catalán parecían encaminarles en este comenzar y les ponían a sólo tres puntos de unos Lakers que, sin fluidez en el pase, tenían en la pintura una mina que explotar con Pau Gasol como protagonista. El pívot catalán tenía una especial motivación por hacerlo bien frente a su público y ex equipo y con ese propósito a mitad de cuarto ya llevaba 10 puntos. Sin duda que su inicio era el principal problema del conjunto de Xavi Pascual (12-18).
Gasol era el hombre referente del equipo angelino, las acciones de Kobe Bryant podían levantar el ooh! del público y provocar el disparo masivo de flashes, pero era el catalán quien ponía la eficiencia y evitaba que el despertar del Regal FC Barcelona y de su amigo Juan Carlos Navarro diera la vuelta al marcador. Sin embargo era cuestión de tiempo que los locales dieran caza a un equipo que comenzaba a pagar el cansancio. Cuando el conjunto blaugrana ajustó su defensa y serenó los nervios el partido se igualó y Erazem Lorbek empataba el partido a 20 tras un triple a pase de Navarro. Poco después, un tiro libre de Pete Mickeal consumó la remontada y situó por primera vez por delante en el partido al Regal FC Barcelona. Sería un dominio efímero pues ya con suplentes en pista los visitantes reaccionaban con dos canastas que le dieron una ligera ventaja al término del primer cuarto (21-24).
El banquillo entra en acción
Los primeros minutos habían demostrado que el reciente campeón de la Supercopa ACB estaba a la altura de los titulares angelinos y el comienzo de segundo cuarto dejaría la evidencia que su banquillo, cuanto menos, era igual de efectivo que el de Phil Jackson. Con una estructura más alta de equipo, el Regal FC Barcelona por fin controlaba su zona y tanto Víctor Sada como Jaka Lakovic podían lanzar contraataques que no tenían respuesta en el bando angelino. El mayor punto físico del equipo ACB le permitía conseguir un parcial de 9-2 con el que volvía a ponerse por delante en el marcador (30-26). Estaba claro que para los Lakers el partido no podía navegar por los mismos cauces y aunque era pretemporada hacía falta cambiar el guión del encuentro y dar entrada a titulares como Derek Fisher y Lamar Odom para dar ese punto de calidad que no tenía el equipo. Pero si en los Lakers hacían acto de presencia algunos de sus titulares, la respuesta no se hacía esperar en el bando blaugrana y, con un triple más adicional de Pete Mickel, el Regal FC Barcelona evidenciaba que no iba a dejar escapar la oportunidad de dar acelerar un duelo que recuperaba el glamour de sus estrellas.
El tiempo corría inexorablemente hacía el descanso y el repertorio de buenas acciones en uno y otro bando. El partido tenía intensidad, emoción (del empate a 30 se pasó al empate a 39 sin que ningún equipo fuera capaz de tomar el control de la situación) y por si hacía falta algo, la polémica rebrotaba con un par de faltas protestadas por una afición que permanecer dormida algunos minutos despertó en el final de la primera parte para dar un nuevo impulso a sus jugadores. Estaba claro que el público entendía que la vara de medir a uno y otro equipo no era la misma y por mucho amistoso que fuera el encuentro eso le hacía calentarse en sus ánimos y acelerar al equipo. Como en el principio de partido, cuando éste se enmarañó el gran beneficiado fue Los Angeles Lakers y Pau Gasol que volvía al encuentro para revivir su duelo anotador con su amigo Navarro.
Los dos eran las máximas estrellas del encuentro, tantos partidos jugando juntos y ahora se retaban en un pista de baloncesto. Si Pau conseguía hacer más grande la sangría interior, Navarro elevaba el espectáculo con dos triples lejanísimos. A “La bomba” parece darle igual, 6,25 que 7,25, sus triples no entienden de distancias y el Regal FC Barcelona disfrutaba de ellos para irse a media parte con una mínima ventaja (45-44).
Barça y Lakers repiten inicio
Como si un calco del inicio de encuentro se tratase, la reanudación comenzó con bronca por parte de los Lakers y desconcierto blaugrana. Estaba claro que en un partido con ritmo el Regal FC Barcelona había sido mejor y en los Lakers sus jugadores sacaban a relucir su experiencia para entorpecer el natural transcurso del encuentro y maximizar su experiencia tomando una ligera ventaja de seis puntos. De nuevo, al equipo blaugrana le tocaba remar contracorriente por un mal inicio y esta vez con el lastre de verse lejos en el marcador (Los angelinos rompieron la barrera de los 10 puntos con el 49-60) y con Kobe Bryant y Ron Artest mostrando su mejor versión, la de la intensidad defensiva y la supremacía en ataque.
Los dos jugadores querían redimirse de su primera mitad. El primero demostrando que el porqué es el mejor jugador del mundo y el segundo sacando a relucir algo más que intensidad defensiva. Especialmente curioso era el caso del escolta de los Lakers, en al jornada previa se había anunciado una participación reducida por su parte, pero en vista de lo complicado que se dibujaba el panorama decidió extender más de la cuenta sus minutos en pista. Con las dos estrellas angelinas funcionando en ataque, no hacía falta ver tan activo a Pau Gasol, aunque cuando entraba en contacto con el balón volvía ser tan efectivo como en el arranque de la velada.
Tiempo de Pete Mickeal
Sin embargo este Regal FC Barcelona no es un equipo cualquiera, es el campeón de la Euroliga y un conjunto a prueba de bombas que no se rinde ante ningún rival por muy campeón de la NBA que sea. Así Pete Mickeal el hombre de los retos imposibles, el jugador que siempre aparece en las grandes noches tomó el relevó de Navarro para liderar un parcial de 14-4 que tuvo en un mate de Fran Vázquez su punto más espectacular. El conjunto blaugrana tocaba de nuevo a la puerta de los Lakers, la ventaja amarilla se reducía a la mínima expresión.
Ocho puntos de Mickeal este periodo cambiaron la cara al encuentro, hicieron que los espectadores se olvidaran de la polémica y se centrasen en animar a su equipo que para entonces ya quedaba claro que era el que vestía de rojo y azul. Centrado en cerrar el aro en defensa y liberados en ataque, los compañeros de Mickeal se sumaron al show de su compañero y ofrecieron los mejores minutos del encuentro para completar la remontada y recuperar el control del electrónico con un duro parcial de 23-10. El final se acercaba y lo hacía con el Regal FC Barcelona venciendo por 72 a 70.
El partido llegaba al momento de la verdad y lo hacía con un nuevo triple de Navarro para recordar su presencia y ajusticiar a unos Lakers que veían peligra la derrota seriamente y decidían dar entrada al partido a Pau Gasol y Derek Fisher. Bromas las justas debía pensar Phil Jackson, con Navarro anotando los siete primeros puntos del último cuarto la victoria se ponía muy cara para el campeón de la NBA.
Si durante todo el partido de amistoso tuvo poco, el hecho de ver a Bryant jugar el final del mismo y ser pitado por 15.000 espectadores dejaban bien a las claras que, a menos de cuatro minutos para el final, sólo importaba una cosa, que el Regal FC Barcelona ganara el partido. Y eso pareció que comenzaba a ser algo más que una realidad cuando Pete Mickeal sumó un nuevo triple a su cuenta y ponía el 84 a 78. La situación dejaba de ser preocupante para ser dramática para los de amarillo, en juego no había ningún título en juego, la victoria no tenía otro valor que el simbólico, pero el orgullo de esta mítica franquicia no podía permitirse perder en Europa.
Quizá por ello nunca entregó la victoria ni cuando estuvo muy abajo en el marcador ni cuando el tiempo parecía decir que el triunfo era imposible. Sólo así se entiende que en pleno festival blaugrana para mayor disfrute de la afición, los Lakers no cesasen en su empeño y convirtiesen el encuentro en un carrusel de tiros libres en el que intentar un último milagro. Pero no fue así y, sin temblarles el pulso, uno a uno, los jugadores del Regal FC Barcelona pasaron por la línea de personal y no fallaron. El Regal FC Barcelona por fin acababa con la resistencia Angelina, la victoria era una realidad (92-88).
Era un fin de fiesta excepcional, el espectáculo había sido notable, la noche había encumbrado a un jugador magnífico como Navarro (todo el pabellón coreó el grito de ¡MVP, MVP! mientras éste lanzaba sus últimos tiros libres) y por si fuera poco el Regal FC Barcelona había demostrado que ya no hay barreras imposibles que superar, ni complejos ante la NBA. Ellos pueden acostarse con el orgullo de haber vencido a los mejores.
Síntesis
92 - Regal FC Barcelona (21+24+23+24): Rubio (-), Navarro (25), Mickael (26), Morris (12), Vázquez (10) -cinco inicial- Ndong (2), Lorbek (3), Sada (3), Grimau (2), Lakovic (5) y Perovic (4).
88 - Los Ángeles Lakers (24+20+26+18): Fisher (12), Bryant (15), Odom (12), Artest (10), Gasol (25) -cinco inicial- Barnes (-), Brown (2), Blake (6), Vujacic (2), Ratliff (-), Caracter (-) y Ebanks (4).
Árbitros: Marc Davis, Jason Phillips, Emilio Pérez Pizarro. Eliminados por seis faltas personales: Vázquez (min.46).
Incidencias: Partido amistoso de la NBA Europa disputado en el Palau Sant Jordi de Barcelona ante 16.236 espectadores
Foto: www.universalbasket.es
Fuente: Álvaro Paricio ACB.COM
Kevin querido, vos te pensas que en un partido “normal” los Lakers pueden perder... con un equipo FIBA.<BR/>Con este criterio los Minnesota son los campeones de la NBA porque le ganaron a los Lakers...<BR/>Los pies sobre la tierra!!!
Responder
PEÑA CAMPEON 07/10/2010
ahora q venga a jugar a mardel contra el mas grande!<BR/><BR/>PEÑAROL... BICAMPEON DE AMERICA!!!
Responder