La llegada de Bodiroga, que lucirá el dorsal 10, supone una clara apuesta de la sección de baloncesto para conquistar la ansiada Copa de Europa y que este año tiene el aliciente de ser Barcelona la sede de la “Final Four” de la Euroliga. El cambio en el banquillo con la llegada de Svetislav Pesic en lugar de Aíto García Reneses ha propiciado la llegada de uno de los mejores jugadores, por no decir el mejor que actualmente juega en Europa, que será el buque insignia de la etapa del técnico yugoslavo.
El entrenador barcelonista y seleccionador yugoslavo ha sido la clave de la operación. Buen conocedor y amigo de Bodiroga, con el que ganó la medalla de oro en el pasado Europeo de Turquía, ha conseguido que el ex jugador del Real Madrid y Panathinaikos se decante por la propuesta azulgrana pese a tener otras grandes ofertas, entre ellas una del Kinder Bolonia superior económicamente.
No obstante, a diferencia de lo propuesto por los italianos, el Barça ficha a Bodiroga por tres temporadas, una más que Pesic. Técnico y jugador emprenderán mañana viaje a Belgrado para iniciar con la selección yugoslava la preparación para el Mundial, lo que ha motivado que la presentación oficial de Bodiroga como nuevo jugador barcelonista se celebre esta misma tarde a partir de las 20.45 horas.
Bodiroga, de 29 años y natural de Zrenjanin (Yugoslavia) retorna tras cuatro años a la Liga ACB, donde jugó en las filas del Real Madrid. El jugador, que anunció el pasado martes que no seguiría en el Panathinaikos griego, quería resolver su futuro antes de incorporarse a la concentración de su selección.
Con Bodiroga, el Barça ya tiene cubierto el cupo de extranjeros para la próxima temporada. El yugoslavo y el lituano Sarunas Jasikevicius serán la pareja foránea del conjunto de Pesic tras haberse desprendido del lituano Arturas Karnisovas.
Bodiroga, sinónimo de éxito
Deportivamente, la contratación de Dejan Bodiroga supone una ambiciosa apuesta para recuperar el trono perdido este año en España por el equipo, entonces dirigido por Aíto García Reneses. El yugoslavo lo ha ganado todo y puede considerarse un sinónimo del éxito.
Dos Euroligas con el Panathinaikos (1999/2000 y 2001/02) son su mejor aval para recalar en Barcelona. Su exitoso palmarés se englosa con tres Ligas griegas con el equipo de Zeljko Obradovic (1998/99, 1999/2000 y 2000/01) y una Liga italiana con Olimpia Milan (1995/96). Además ha conquistado una Copa italiana con Olimpia Milan (1995/96) y una Eurocopa con el Real Madrid (1996/97).
A nivel de selección, sólo le falta unos Juegos Olímpicos pues ha contribuido a que Yugoslavia ganase la medalla de plata en Sydney´2000, el oro en el Campeonato del Mundo de Grecia´98, y en los Europeos de Atenas´95, Barcelona´97 y Turquía´01. También fue bronce en el Europeo de Francia´99.
Se formó en el Proleter Zrenjivac antes de recalar en el KK Zadar, donde jugó dos temporadas (1990/91 y 1991/92) antes de dar el salto a la LEGA italiana, donde jugó en el Stefanel Trieste (1992/93 y 1993/94) a las órdenes del técnico Bogdan Tanjevic y al lado de Gregor Fucka, antes de jugar en el Olimpia Milan (1994/95 y 1995/96).
Después de su paso por Italia, fichó por el Real Madrid, que buscaba recuperar la Liga ACB en manos del Barcelona, aunque no pudo conquistar el título en sus dos años en el club madrileño (1996/97 y 1997/98) y tuvo que conformarse con el subcampeonato y con el triunfo en la Copa Saporta en 1997. Tras su primera etapa en España, emprendió la aventura griega de cuatro años con su inseparable Zeljko Obradovic.
Durante su carrera, además, Bodiroga ha recibido numerosos premios y reconocimientos, además de ser escogido con el número 51 por Sacramento Kings en el “draft” de la NBA de 1995. El yugoslavo, nombrado mejor deportista de su país en 1998, fue elegido MVP de la final del Mundial de 1998, de la Liga de Grecia las temporadas 98/99 y 99/00 y de la Liga ACB la temporada 97/98.
Barcelona (Europa Press).-
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