Existe en nuestra liga nacional, como en todo sociedad, diferencias de clases, y son cada vez más notorias. Los reflejos son las prematuras contrataciones de jugadores que realizan apenas algunos equipos, en tanto otros se debaten en su continuidad o no. Y como muestra de poder, además sacan ventajas de situaciones tendientes a mejorar la compentencia.
En la edición venidera la competencia se dividirá en dos grupos (Norte y Sur) y la gran discusión que se plantea es la integración de los equipos por zonas.
El punto más saliente es el problemático viaje que significa ir a la ciudad de Pico, donde aguardan dos equipos. Hoy el grupo del Norte no los quieren consigo, al igual que los del Sur. El dilema es que la postura del Sur relegaría a dos equipos de la Capital Federal a jugar con Gimnasia de Comodoro.
Es facil intuir que tanto Atenas, Andino, Libertad, los equipos de San Nicolás y los de Capital no quieren a Pico en su zona. Y los de Capital con el agravante que pasarían - dos de ellos - al Sur y deberían viajar a Comodoro.
Por otra parte, hay clubes que apenas si podrán participar de esta temporada sin otro objetivo que sobrevivir. Tal es el caso de Andino de La Rioja, Independiente de Pico y Obras Sanitarias. Existe también un grupo que hará una liga austera, como Gimnasia de Comodoro, Quilmes, Pico FC, Ferro, Belgrano de San Nicolás y Gimnasia y Esgrima de La Plata y por organización apenas un paso más arriba se encuentran Peñarol, Regatas y Estudiantes de Bahía Blanca. Luego si, están los poderos como Atenas, Boca, Libertad de Sunchales y Estudiantes de Olavarría.
En las últimas horas se escucharon trascendidos como que Osella iría al Bi-campeón de la liga, que ya cuenta con Gaby Díaz, Paolo Quintero, Gabriel Fernádez y Víctor Baldo, y además trabaja sobre la renovación de Daniel Farabello. Si repiten los americanos están para jugar solos el pre-mundial de Neuquen.
Atenas, por su parte, sufre la incógnita de que Marcelo Milanesio diga si o no. No los preocupa el dinero, solo la decisión del capitán. También armarán un gran equipo que ya tiene a JJ Eubanks y parte del plantel de la liga pasada.
El subcampeón, Libertad, contrató un experimentado técnico como Nestor García, y aseguró uno de los extranjeros más rendidores de la competencia, Emeka Okenwa, sumado a la base del plantel del año pasado.
Boca será el Pichi Campana y su balllet pero los americanos serán de importania más el base que saldrá de Stanic o Diebold.
Regatas de San Nicolás, con mucho orden dejó ir una ficha como Julio Rodríguez y contrató tres: Roberto Gabini, Fernando Malara y Diego Alba.
Y por Bahía Blanca son solo promesas de un buen equipo.
Mientras que Peñarol tiene dos fichas (Fernando Rodríguez y Hedmann) y muchas ganas de repetir la actuación del año anterior.
Que lástima que este análisis no pueda seguir con los demás equipos. El resto se debate en paradas Quijotescas para conseguir el dinero necesario para hacer algo decente. Una vez más quedará en evidencia la historia repetida de la Liga de ricos y pobres. Fiel reflejo de un país que se muere por individualista.
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