Y la racha se cortó. Argentina perdió anoche ante México por 81-70 en el Palacio de los Deportes del Distrito Federal y ante 10.000 personas. Con este resultado finalizó un invicto de 11 años en donde los aztecas no podían vencer a los argentinos, desde los Panamericanos del ’91 en la Habana. Y además, hacía 11 meses que la Selección no perdía un partido desde los Juegos de la Buena Voluntad de Australia, ante Estados Unidos.
Sin dudas, la figura y goleador del partido fue Emanuel Ginóbili con 25 tantos, tres asistencias, cuatro rebotes y tres robos. El jugador de los Spurs fue el único que logró penetrar la defensa azteca. Y esa fue la imagen del partido, solo individualidades. A la Selección le faltó ese juego de conjunto con el que se destaca partido a partido. Recién se notó mayor unión colectiva con la participación del base Pepe Sánchez, pero no alcanzó. Otros que aportaron fueron Andrés Nocioni con 12 y Luis Scola, quien con un protector bucal para cuidarse la zona afectada pudo jugar y terminó con 11 puntos.
Para México, quien no clasificó para el Mundial de Indianápolis, fue un triunfo histórico ya que apenas se juntaron el lunes. Además, fue la primera vez que el jugador de los Dallas Mavericks Edurado Nájera vistió la camiseta azteca, fue el goleador de su equipo con 22 puntos y 10 rebotes y se destacó. Por detrás, el ex de Phoenix Horacio Llamas marcó 16.
El buen trabajo de los locales se vio en el tercer cuarto, ya que luego de igualar en 37 lograron finalizar el parcial con una ventaja de 13. Ya en el último período, los mexicanos supieron manejar el partido y los argentinos mostraron impotencia. Hubo ocasiones en que recurrieron al juego violento, y aunque no pasó a mayores parecía que todo terminaría mal.
Este fue el primer encuentro de una serie de amistosos entre ambos combinados que continuará hoy, en el Gimnasio Manuel Bernardo Aguirre de Chihuahua, y el lunes, en el Gimnasio de la Universidad Autónoma de Sinaloa de Culiacán.
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