“Yo voy a dar el máximo esfuerzo. Voy a entrar a tirar y meter bolas, voy a jugar defensa, a recoger rebotes y traer energía para contagiar al resto de los jugadores”, dijo el escolta cuando se enteró que iba a formar parte del preseleccionado de su país para el torneo de Mar del Plata.
Mojica se caracteriza por ser un estupendo defensor -es la referencia defensiva de la selección boricua en el perímetro- y por ser un jugador de sacrificio, que juega cada pelota como si fuera la última. Nació en Colorado y fue criado en Worcester, Massachusetts. ¿Por qué juega para Puerto Rico? Porque su padre es oriundo de Mayagüez.
La infancia de Javier fue difícil, ya que los conflictos familiares formaron parte de su accionar diario. “Mientras me desarrollaba, en mi crecimiento no necesariamente siempre viví con mis padres. Mii madre entró y salió varias veces de la cárcel. Fueron cosas que tuvieron que ver con relaciones que tuvo con personas que estaban involucrados en drogas. Mi padre también estuvo preso antes, cuando tuve seis años. No fue mucho el tiempo que viví con mi padre”, dijo Mojica al diario puertorriqueño El Nuevo Día tiempo atrás.
El escolta boricua se crió con sus tías y su abuela cuando su madre estaba fuera del hogar, ayudando a lidiar con los problemas de un chico que no tiene a sus padres cerca.
“Llegó un momento en que también tuve mis errores. Pero si algo aprendí en la vida fue a superar mis tropiezos, a levantarme y seguir adelante”, agregó el francotirador a El Nuevo Día.
Esta historia de vida dificil no hizo más que motivar a Mojica a lo largo de su carrera. Su espíritu de sacrificio, su capacidad para nadar en aguas difíciles, lo convirtieron en un ganador por naturaleza. En un hombre de temple de acero.
Los programas sociales de YMCA y el Boys Club en Massachusetts lo encaminaron hacia el básquetbol cuando era sólo un jovencito. Tiempo después, una beca ganada en la Universidad de Connecticut hizo que la oscuridad se transforme en algo de luz a una edad aún temprana.
“Cuando las cosas no le salen, él como que se rompe y se habla duro a sí mismo. Ahora puedo comprender la razón por la cual lo hace. Es tremendo ejemplo porque a pesar de lo vivido es una persona bien disciplinada, que trabaja duro y siempre está receptivo”, había dicho Carlos Calcaño, dirigente de los Cariduros, equipo donde jugó Mojica en 2007.
Mojica, quien no pudo estar en el equipo puertorriqueño que jugó en Turquía 2010 tras lesionarse su mano izquierda, lesión que le hizo perder la Serie Final del Baloncesto Superior Nacional y los eventos internacionales, tendrá una nueva chance con el equipo boricua en el Preolímpico.
Llegará a Weber Bahía Estudiantes como tercera ficha extranjera, acompañado de su compatriota Ricky Sánchez y del centro estadounidense Jerome Meyinsse.
De esta manera, las nueve fichas mayores del equipo bahiense serán las siguientes: Pepe Sánchez, Lucas Faggiano, Juan Espil, Ariel Zago, Federico Aguerre, Mateo Gaynor, Javier Mojica, Ricky Sánchez y Jerome Meyinsse.
Junto a Pepe Sánchez y Ricky Sánchez, Mojica se incorporará al equipo de José Luis Pisani a mediados de septiembre.
FOTOGRAFÍA: Gentileza Primera Hora
Prensa Bahíabasket.com
Muy buena incorporación, estuve de vacaciones en Puerto Rico y como fanático del basquet fuí a ver un partido de la liga y quedé deslumbrado con este jugador. Tiene una intensidad y una viveza para jugar que dá gusto verlo. No sabía su historia pero despues de leer la nota más me alegra que venga a Bahía. Al pibe le doy la mejor bienvenida y los hinchas les aseguro que este jugador viene para quedarse un buén tiempo....mas con un base como Pepe.
Responder
Jose 21/08/2011
Weber Bahía Estudiantes es campeón en esta temporada. Recuerden lo que les digo, tienen un equipazo. A cosechar lo que sembraron, se ha dicho.
Responder