Aunque Argentina cayó en la final, los jugadores se retiraron contentos del parquet. Primero porque se volvió a disputar esta instancia luego de 52 años. Se cumplió el objetivo de pelear por una medalla. Fue el primer equipo que derrotó al Dream Team y se retiró invicta, ya que recién cedió en la prórroga.
Los dirigidos por Rubén Magnano, pese a no contar con Ginóbili desde el inicio, salieron decididos a triunfar y le pelearon de igual a igual en todo momento. Hubo trámites que dominó Yugoslavia, pero Argentina superó a su rival por hasta diez puntos y acarició la victoria si los árbitros hubiesen sido justos y honestos en los fallos finales. En el suplementario sólo anotó dos puntos contra 9 del vencedor, pero se retiró del Mundial como un verdadero campeón.
Argentina apostó al juego interior con Oberto y Wolkowyski muy activos dando un verdadero dolor de cabeza a un desconocido Divac. Andrés Nocioni, que reemplazo a Ginóbili, aportó buenos movimientos en ofensiva pero debió marcar a los goleadores de Yugoslavia y se vió complicado en algunos sectores.. El “Chapu” cumplió su función y no se sintió la ausencia de una de las figuras del Mundial.
El campeón del mundo en Grecia 98 sintió la ausencia de Divac, pero en el primer parcial Vujanic y Koturovic hicieron estragos y llevaron al equipo europeo a la victoria por 24-19 al cierre del primer cuarto. Wolkowyski de gran actuación debió salir por una dolencia en una de sus piernas y Oberto cargó con la responsabilidad anotadora.
Con el ex Seattle y Dallas con molestias y algunos con problemas de faltas, Magnano decidió rotar el plantel y darle minutos a jugadores que provenían del banco. El resultado fue positivo porque Montecchia y Palladino le dieron gol desde el perímetro y las principales armas europeas fueron bien controladas.
Con todo a su favor, Argentina pasó al frente por 29-27 para desatar el delirio de sus seguidores, pese a que el Conseco Field House mostró mayoría de yugoslavos. Los dirigidos por Magnano desaprovecharon una buena oportunidad de distanciarse, ya que en el peor momento de su rival, Montecchia cometió una falta a Jaric y luego de protestar se ganó un técnico que fue bien aprovechado porque el resultado cambió de mano. Los europeos se agrandaron a través de Stojakovic y pasaron a dominar por 40-35.
El técnico argentino rearmó su estrategia y Argentina se puso a un punto (39-40), pero Bodiroga sumó un tiro libre para llegar a la primera mitad arriba por 41-39.
En el entretiempo Argentina se convenció que podía ganar. Un gran arranque en la tercera parte lo hizo protagonista y comenzó a dominar las acciones de juego.Fabricio Oberto, con nueve puntos en el cuarto, fue el que encabezó la levantada albiceleste. Con un doble de Wolkowyski sacó 10 de diferencia (53-43) y todos comenzaron a pensar en un sueño con final a oro.
Los Argentinos explotaron en sonrisas cuando vieron calentar a Ginóbili y a falta de dos minutos ingresó al parquet haciendo su debut en la final del Mundial. Su aparición no fue ideal porque coincidió con la remontada europea. De todas formas el “Manu”, pese a no estar 100%, dejó todo de sí para el bien de su país. Bodiroga sumó cuatro puntos consecutivos y dejó a su selección a seis puntos.
Una nueva remontada, como sucedió ante Nueva Zelanda en la semifinal, se hizo presente en la cabeza de sus seguidores. El final del tercer cuarto llegó con dos puntos de Divac para dejar 57-53 a favor de Argentina e insertar un cuarto no apto para cardíacos.
Magnano insistió con el poderío en la zona pintada y tuvo buenos dividendos. Pesic optó por cuatro perimetrales y un sólo pivot. En ofensiva salió bien, pero en defensa no pudo parar a un excelente Oberto que sumó 10 puntos en el último cuarto. Argentina se hizo enorme y dominó por buenos momentos. El ex pivot de Atenas de Córdoba puso el marcador 73-66 y varios se ilusionaron con la medalla dorada.
Bodiroga, lentamente, comenzó con la animación de su equipo. Un parcial a su favor dejó el marcador 74-73 con sólo 30 segundos para el final. Argentina repuso y Oberto recibió falta. El cordobés anotó un punto para adelantarse 75-73. Dos libres de la figura y mejor jugador de europa en la última temporada pusieron el tanteador 75 iguales. Scola perdió el balón en mitad de campo y cortó con falta (muy dudosa) a Divac.
El pivot de Sacramento fue a la línea con sólo cinco segundos y aunque no se crea falló los dos. Tras tomar el rebote la pelota le llegó a Sconochini que tuvo en sus manos la última pelota del encuentro. Corrió, eludió a dos yugoslavos, penetró y Jaric lo descolocó abajo. la pelota no entró y los árbitros se tragaron el silbato como sucedió en las últimas jugadas otorgándole una vida más a Yugoslavia. 75 iguales y a supelmentario.
En este período Argentina se mostró muy errático y Yugoslavia hizo pesar su experiencia en partidos importantes. Stojakovic adelantó con un triple a su país. Dos puntos de Bodiroga le dieron una luz de cinco. Los dirigidos por Magnano fallaron en sus lanzamientos, producto de la buena defensa rival y por sentir que les robaron un juego que era suyo. Sólo Oberto anotó dos puntos y Montecchia falló un triple. Los dueños de europa contralaron las acciones y festejaron el 84-77 que los coronó como bicampeones del mundo.
SÍNTESIS DEL PARTIDO
Argentina (77): Sánchez 3, Sconochini 3, Nocioni 5, Wolkowyski 11, Oberto 28 (fi), Scola 11 (x) , Palladino 10, Victoriano 0, Ginobili 0, Fernández 2 y Montecchia 4. DT: Magnano
Yugoslavia (84): Vujanic 7, Gurovic 3, Stojakovic 26, Divac 3, Koturovic 3 (fi) ,Bodiroga 27, Jaric 9, Tomasevic 6 y Rakocevic 0. DT: Pesic
Árbitros: Pitsilkas (Grecia) y Mercedes (República Dominicana).
Parciales: 19-24, 39-41, 57-52 y 75-75.
Estadio: Conseco Field House.
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