La selección Argentina cumplió una histórica actuación en Indianápolis. Consiguió la mejor ubicación en un Mundial fuera de su país y acarició la medalla dorada si no fuera por errores de los árbitros. Al finalizar el encuentro todos coincidieron en que fue un robo y que los jueces protagonizaron un papelón.
“Hicimos un gran partido y nos retiramos orgullosos por nuestro desempeño”, dijo Hugo Sconochini que al finalizar el encuentro reiteró su decisión de abandonar la selección. Sobre la última acción de juego durante el tiempo regular, el capitán del equipo manifestó que fue foul de Jaric. “Me voy con la gran sensación que nos robaron algo que era nuestro. Pienso que me revantaron abajo del aro y los jueces no tuvieron coraje para cobrarlo. Hicieron un gran papelón, pero influyó el peso político de Yugoslavia y casi le ganamos con árbitros y todo”.
El alero de Argentina que jugará la próxima temporada en el Milano de Italia reiteró que jugó su último partido. “Al finalizar el encuentro saludé a todos los chicos en el vestuario y les agradecí por dejarme formar parte de un grupo magnífico. Me voy contento porque logramos el objetivo propuesto y desde ahora seré un hincha más y siempre los voy a seguir”.
Otro de los jugadores que se fue fastidioso con los jueces fue Emanuel Ginóbili. “Tengo la leve sensación que nos robaron un poco. Que te roben la medalla dorada es lo peor que puede suceder porque la sensación dura de por vida”.
El nuevo fichaje de los San Antonio Spurs ingresó en la segunda mitad. Luego reconoció que habló con Magnano y que no se podía perder el encuentro. “Me costó mucho estar en el banco pero el dolor era grande. Fue una verdadera lástima ya que hace tres años que no me pierdo un juego y este era uno de los más importantes de mi vida.
El escolta se retiró orgulloso por la actuación en Indianápolis. ”Lo que conseguimos es grande y me pone muy contento por el desempeño del equipo lograr una medalla.“
”Tuvimos controlado el juego pero fue una lástima perderlo en los últimos segundos por la buena actuación del plantel por aquella acción. Lo importante fue que se dejó bien parado al básquet argentino en el mundo y ahora debemos mantener una regularidad en todos los certámenes que disputemos“, acotó Fabricio Oberto, goleador argentino en el juego final.
Por su parte, Rubén Wolkowyski, como el resto también cargó sus tintas en los árbitros del juego: “Nos quitaron el partido de las manos”, fue lo primero que dijo el Colo, pero enseguida aclaro que si hay motivo para estar contento es porque perdieron jugando bien.
“Estamos contento con la Plata, eso no hay dudas - contó el colo - pero nos da Bronca que nos hayan robado la medalla”. Con respeto al partido señalo que “Era obvio que se iban acercar en el final, porque tiene jugadores muy buenos y con experiencia NBA, pero también lamento que sacamos una buena diferencia y no supimos aprovecharla mejor”
Al ser consultado si le había dicho algo al árbitro después del partido contestó que “No es nuestra tarea ni debe hablar con los árbitros, para eso están los dirigentes, pero creo que ellos deberán hablar de lo que paso sino la FIBA es una Joda”.
Por último, el ”Puma“ Montecchia definió su sentimiento tras el partido con dos adjetivos: ”calentura y amargura“. ”No caímos en lo que logramos pero los argentinos somos así, de sangre caliente. Hoy jugamos un partido bárbaro pero a uno le hubiese gustado ganarlo. Yugoslavia es un gran equipo y hoy demostramos que somos lo mismo que ellos“
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