No fue el arranque esperado. Argentina ingresó al partido dentro de dos variantes posibles: desconcentrada o confiada. En cualquiera de los dos casos, lo pago caro y se llevó un buen susto.
Senegal, equipo vapuleado por todos los rivales con los que hasta hoy se midió, comenzó ganando y por buen margen en los primeros tres minutos (0-7), pasando las nuestras un total de cuatro sin convertir, hasta que un libre de Sofía Chelini movió el marcador (1-7).
De todas formas el primer acierto de campo llegaría recién en el promedio del cuarto, cuando Victoria Llorente acertó un doble (3-9) que dejó atrás el frío 0/5 que hasta ese entonces reinaba en las estadísticas nacionales. Sirvió de empujón para generar juego, pero la brecha entre uno y otro perduró sobre los cinco tantos (5-10).
La celeste y blanca se fue perfilando de mejor forma de cara al cierre de los primeros diez minutos, teniendo problemas el cuadro africano para sobrellevar la ventaja antes adquirida. Julieta Armesto acortó a tres (7-10), y si bien las senegalesas se volvieron a distanciar, un parcial final de 6-0 para las criollas dejó el marcador en tablas (13 por bando), de car al segundo capítulo.
Nuestras chicas iniciaron ese nuevo segmento acunando una constante negativa que las persiguió durante todo el certamen: bajar su producción, o más bien, no conseguir mantener el nivel más alto mostrado en el periodo que lo antecedió.
No pudieron quebrar de movida a sus rivales, e igualadas en 15 caminaron los dos minutos y medio iniciales. Por primera vez en el partido, 30 segundos más tarde, Argentina pasó al frente con un libre de Magalí Armesto (16-15).
De igual manera ese cambio en el liderazgo no catapultó a las nuestras, las cuales no consiguieron despegarse en el tanteador, aunque sí se mantuvieron arriba al llegar al promedio (20-17), momento en el cual el entrenador Hernán Amaya solicitó un tiempo muerto.
La selección nacional se encontró una vez más ante una laguna ofensiva, la cual de movida le dio dos minutos sin conversiones, tiempo suficiente para que Senegal empardara en 20, aunque en total fueron tres, hasta que Llorente lo consiguiera mover y le devolviera las riendas del juego a nuestro equipo (22-20).
Más allá de haber sido la jugadora más resonante dentro de las filas criollas en todo el torneo, a pesar de que no estuvo exenta de los malos porcentajes como el resto de sus compañeras, Victoria Llorente tuvo principal injerencia en este cuarto, marcando 8 de los 14 puntos totales del equipo.
Como en el primer chico, Argentina consiguió construir en los momentos epilogantes un parcial de 6-0, el cual la dejó 26-20 de cara a los segundos finales. Y si bien Sofía Chelini estiró la máxima a siete (27-20), ambos conjuntos se dirigirían a zona de vestuarios separados por seis tantos, 27 a 21.
El retorno del descanso largo trajo para las nuestras la buena noticia de saber que pudieron corregir su lanzamiento de valoración triple. Luego de cerrar el primer tiempo con 0/8 dentro de ese rubro estadístico, Magalí Armesto acertó dos en los primeros tres minutos, para estirar la brecha a diez (33-23), la cual no se frenaría allí, ya que 30 segundos más tarde un doble de Llorente la llevaría a 12 (35-23) y se mantendría hasta la mitad del cuarto.
De todas formas, en el camino criollo no todas fueron rosas. En sólo un minuto Senegal estableció un parcial de 7-0, para colocarse a cinco (35-30) a falta de 3:39, dejando en plena evidencia una nueva sequía de goleo por parte de las nuestras.
En total fueron cuatro minutos y medio donde Argentina no se encontró con el cilindro, hasta que Sofía Aispurúa rompió el hechizo y recobró los siete de distancia (37-30), en una licencia que a la Argentina le costó caro en primera ronda, y que por los últimos dos rivales (Mali y Senegal), se pudo tomar sin tener que lamentarse luego.
A falta de un minuto un triple de Micaela Sancisi puso diez tantos de brecha (40-30), sin conseguir ninguno de los dos elencos volver a sumar en lo que quedó de cuarto. Por ende, con ese marcador ingresaron al capítulo final.
Y lo que no pudo hacer en los 30 minutos anteriores, la celeste y blanca lo gestionó en tan sólo dos minutos y medio. Como en el segmento anterior, pego primero, aunque esta vez para ir cerrando el match.
Un parcial de 8-0 (4 ptos de Aispurúa y otros 4 de Llorente) fueron envión más que suficiente para que nuestras chicas se separaran por 18, al mismo tiempo que Senegal pasaba cuatro minutos sin convertir. La distancia no se frenó allí, llegando a los 24 (55-31) en el promedio de ese último cuarto, lo que significó un 15-1 par las nuestras, o dicho de otra forma, más puntos en esos cinco minutos que en cualquiera de los periodos anteriores.
Esa cosecha le aseguró el triunfo a la Argentina, que sólo debió esperar a que el tiempo expirara para celebrar su segunda y última alegría en el certamen. El resultado final fue de 62 a 40, con Llorente una vez más como goleadora con 22 unidades (10/19 de campo).
De esta forma terminó el mundial U19 de Lituania para la celeste y blanca, que sumó dos triunfos (Mali y Senegal) en seis presentaciones (Australia, España, Japón y Corea). El análisis, claro está, llegará en los próximos días.
Síntesis
Argentina (62): Micaela Sancisi 10, Victoria Llorente 22, María Emilia García León 0, Julieta Armesto 4 y Sofía Chelini 4 (inicial); Florencia Martínez 0, Mara Marchizotti 0, Magalí Armesto 7, Sofía Aispurúa 13, Julieta Ale 0, Agustina Ledesma 0 y Agustina Jourdheuil 2. DT: Hernán Amaya.
Senegal (40): Dieme 13, Diagne 2, Ndao 9, Sy 3 y Diallo 5 (inicial); Fall 0, N. Ndao 0, Ndiaye 2, Ba 0, Kebe 4 y A. Ndiaye 2. DT: Birahim Gaye.
Parciales: 13-13 / 27-21 / 40-30.
Árbitros: Shemmesh – Abassi - Aneja.
Estadio: Švyturio Arena.
Foto: FIBA.com
Emanuel Niel
En twitter @ManuNiel
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Un poco de historia no nos viene mal.<BR/>10 años atrás se insistía con proyectos de no mas de 1,40 de altura, que para el otro año no podía ni pasar agua. Así se desperdicio a chicas con altura, que jugaban mal pero tenían mas posibilidades que las que viajaron. Conclusión, al próximo campeonato la petisa no viajaba y la alta ya no jugaba, mataron dos jugadoras de un tiro, una porque se choco con la realidad de estar jugando un deporte para altos y la otra porque nadie le enseñaba. Así fueron pasando los años y las selecciones, con dt. que apuestan a salir un puesto mejor que en el torneo anterior para declarar al regreso que se había mejorado mucho el básquet femenino. No labura nadie, hacen humo, humo y mucho humo, no generan nada. Hoy otro fracaso, que cuenta con agradecidos por el viaje turístico, lo hacen defendiendo este desastre. La realidad me da la razón le duela a quien le duela. Quieren propuestas, primero digan la verdad, que cuando se acerca alguien lo primero que hacen es descalificarlo, no escucharlo y decir que quiere moverle el piso al cuerpo técnico que hay en la selección. Les digo que el piso se les mueve solito, con el papelón que dejaron tienen un terremoto en sus pies, entreguen las llaves, sean honesto intelectualmente.
ResponderNo se puede disimular la pobre actuación de las chicas argentinas, pero tampoco hay que caer en la misoginia subnormal y poco viril de destrozar a las jugadoras. Reconozco que Argentina no está a la altura de los mejores, pero tampoco puede ser arrasada dentro de la cancha. Dicho esto y sin ánimo de buscar excusas, solo quiero puntualizar dos cosas : cualquiera que haya estado en Europa sabe que ahí el básquet femenino es súper profesional; la TV pasa partidos todos los fines de semana en Francia, Holanda, España, Italia, etc. Por algo muchas de las mejores de la WNBA se van a jugar a Rusia la temporada europea. Los torneos locales son muy fuertes y encima tienen mucha competición internacional. Además esas jugadoras son formadas en los colegios con competencias escolares continuadas y exigentes, y lo mismo pasa en Estados Unidos con la NCAA. ¿Nuestras chicas? Bueno, solo juegan un poco en Buenos Aires y en algunos otros pocos puntos del país gracias al esfuerzo de un puñado de técnicos y dirigentes audaces y abnegados. Y en los colegios basta con ir a ver el más cercano que uno tenga para ver lo que se hace en la hora de educación física. Así y todo observen que potencias como Rusia, Holanda, Serbia y el local Lituania quedaron afuera de cuartos de final. Italia ni siquiera clasificó al torneo. Pero hay más. En varones no nos va mucho mejor, este bajón no es exclusivo de las chicas, las razones son profundas. Y no se olviden que hicieron falta más de diez años de Liga Nacional para poder volver a una Olimpíada, a la que estuvimos 44 años sin ir, y no fue porque los jugadores eran malos. Hay que trabajar y esperar. Algún día una chica argentina va a jugar en la WNBA, de eso estoy seguro. Gracias.
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Que lejos del bronce de tailandia!!! 24/07/2013
Que lejos del bronce de tailandia que está este equipo, no dieron ni lastima, pero esperemos que reflexionen y que tanto las jugadoras como cuerpo técnico, pongan los pies sobre la tierra, se salva V llorente y que de paso sea no es de esa categoria es mas chica, se tuvo que poner el equipo al hombro porque no apareció ninguna, la chiquita de la base que se cree que se come crudo a todos....mmmm fracaso total, que siga jugando en su club y aprendiendo muuuuuuuucho porque no está para la selección ni de su provincia, y así una por una no aporto casi nada, desgraciadamente hay que decirlo con todas las letras, se perdieron varias camadas por el desastroso manejo del femenino, tanto de dirigente como de la federaciones, esperemos que la confederación revierta este trabajo.
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