El cotejo inició desprolijo, con pérdidas no forzadas y bajos porcentajes. El local le puso las fichas a Blakeley quien tomó la bandera por los suyos, y sin sobrarle nada, consiguió llevarlos arriba 9-7 en los primeros cuatro minutos.
El cuadro chubutano se movió bajo el ritmo de Nicolás De los Santos, aunque su mayor rédito lo encontró cuando Johnson y Clancy conectaron en los metros cercanos al cilindro. Por esos caminos se movió el trámite hasta ingresar a la recta final del primer cuarto.
Los cambios le dieron aire al verde, que encontró en las manos de Scala los triples necesarios para saltar al frente en el marcador y sacar cinco (11-16, 2:30). Bahía solicitó minuto y realizó cirugía mayor, devolviendo al parquet a Gerbaudo, Martínez y Blakeney.
El dueño de casa achicó a uno (15-16), pero fue el huésped quien cerró mejor, recuperando los cinco de luz al momento de ingresar al segundo cuarto.
En ese segmento el patagónico mostró lo mejor de sí, dando un variado repertorio que lo depositó 12 tantos arriba (18-30) en los primeros tres minutos. Para ello fue clave su defensa, y en el otro cilindro, el reparto de tantos, viviendo un interesante lapso el interno Pablo Orlietti.
El anfitrión tocó fondo y resurgió, apoyándose en el dueto Martínez-Lauría. Corrigió errores en su campo, y miró con mayor determinación el canasto ajeno, incluso al momento de ir en búsqueda de la segunda oportunidad, algo que le había faltado en los diez minutos anteriores.
El bahiense dejó de lado las tibiezas, y a través de una mayor convicción fue construyendo un parcial 16-2 en poco más de tres minutos, para saltar al frente del marcador 34-32 con 120 segundos por delante.
Gonzalo García recostó sus posibilidades de juego en el perímetro, y a través de las manos de Cavaco consiguió salir del pozo. Dos bombas del tirador sacaron del letargo al patagónico, que maquilló su defensa, aguantó como pudo la carga del rebote por parte del cuadro bonaerense, y se olvidó del sofocón vivido, para dirigirse al descanso largo con ventaja de tres (37-40).
Con el retorno de la zona de vestuarios se repitió la historia del parcial anterior. Poco a poco Gimnasia fue despegándose en el tanteador, apoyándose en el oficio de Clamcy, y la falta de recursos ofensivos que mostró su rival, con un Clark apagado y sin un referente que tome la lanza.
“Sepo” Ginóbili buscó repetir la formula efectiva de combinar a Martínez con Lauría, y sumarle a Ambrosino como un “cuatro” disfrazado, pero la suma no dio los mismos resultados. El comodorense generó anticuerpos, y primero con una racha de Schattmann, y luego con otra de Orlietti, estiró la brecha a 14, 44-58.
Gerbaudo tomó la batuta por el local, quien quemando las naves, y con más ímpetu que básquet empujó a los suyos a recortar la distancia, la cual se encasilló en 11 al momento de llegar al cuarto final (53-64).
Una vez más fue el “verde” el que pegó primero. Pasándose bien el balón, logró sacar una diferencia de 15 tantos (53-68); siendo en ese momento donde el local buscó otra variante táctica para revertir la situación.
Plantó una media cancha de “petisos”, con Gerbaudo, Whelan y Martínez, para atosigar en defensa y darle revoluciones al ataque. Y la inversión dio resultados hasta que Blakneley cometió su quinta falta (4 en cuatro minutos) y dejó rengo el poste bajo anfitrión (57-68, 6 minutos).
Clark hizo las veces de ala-pivot al momento de defender; Rasio quedó emparejado con Orlietti, y ya sin Scala en el cuadro chubutano (afuera por faltas), la brecha entre ambos fue de seis en el promedio del periodo (62-68).
El foráneo Clark pareció querer tomar un rol protagónico, y con un triple dejó al bahiense a tres (65-68), pero del otro lado, tres puntos seguidos de Johnson le devolvieron seis de luz al huésped (65-71).
El bahiense equivocó los caminos, los nervios le jugaron una mala pasada, y cuando hizo una buena selección de tiro, el balón no entró. Esos condimentos estuvieron a pedir de los dirigidos por Gonzalo García, que accionando el tándem De los Santos – Orlietti; sumado a la experiencia de Cavaco, cerraron mejor el juego y se quedaron con el triunfo.
Síntesis
Bahía Basket (71): Gastón Whelan 2, Matías Nocedal 5, Ivory Clark 8, Lisandro Rasio 9 (X) y George Blakeney 13 (X) (inicial); Mateo Gaynor 0, Agustín Ambrosino 9, Diego Gerbaudo 11, Gonzalo Martínez 9 y Nicolás Lauría 5. DT: Sebastián Ginóbili.
Gimnasia Indalo (78): Nicolás De los Santos 12, Leonel Schattmann 7, Diego Cavaco 10, Byron Johnson 11 y Sam Clancy 9 (inicial); Santiago Scala 6 (X), Pablo Orlietti 21 y Exequiel Cassinelli 2. DT: Gonzalo García.
Parciales: 15-20 / 37-40 / 53-64.
Árbitros: Rougier – Castillo.
Estadio: Dr. Osvaldo Casanova.
Foto: Prensa Bahía Basket.
Emanuel Niel
En twitter @ManuNiel
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Rasio: "Cada uno debe entender su rol"
Gabrielon 21/10/2013
Por un lado me alegro que haya que registrarse para comentar. Y por el otro lado solo destacar el escaso público que concurrió al Casanova. Se ve claramente por fotos que este equipo no entusiasma al bahiense.
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