Javier Martínez no ocultó su desazón por la derrota 96-89 con Peñarol que los privó de ir por un título en el Súper 8. Apenas terminado el partido dijo: “Este equipo se armó para ganar todo y hoy no lo logramos. No hablo de fracaso pero recién en el segundo tiempo mostramos algo de amor propio para no irnos a las fiestas tan cabizbajos. Es una ecuación rara e injusta quizás estar primeros en la Liga pero irnos cabizbajos a las fiestas”.
Al intentar explicar el parcial desfavorable de 61-34 en el primer tiempo, el base paraguayo dijo: “No pudimos imponer nuestro juego defensivo, ellos agarraron confianza y se dio la diferencia que se dio. Después nosotros nos apuramos un poco en ofensiva, ellos encontraron goles fáciles, tiros de 3 puntos abiertos y creo que fueron los peores 20 minutos de los últimos tres años que estamos con este mismo cuerpo técnico y, bueno, tenemos que hacernos responsables y un mea culpa. Hemos cambiado un poco la cara en el segundo tiempo pero el objetivo no se logró y se tendrá que trazar otra meta en el mediano plazo”.
“Nosotros teníamos que venir a pisar fuerte y no lo hicimos”, recriminó Martínez.
Más adelante, el temperamental jugador dijo sobre su presente personal que se siente “totalmente recuperado, mejor incluso que en otros años. No hay mal que por bien no venga. Con esa enfermedad (mononucleosis infecciosa) empecé de cero un trabajo kinesiológico que hoy está dando sus frutos. Estoy asumiendo un rol diferente al de otras temporadas, viniendo de atrás. Pero es lo que me toca y el equipo está primero y no se debe tocar”.
Por último, Martínez dijo que “lastimosamente el público no acompaña. No sé si se hizo con antelación buena pero desde la organización le aportaron buenas cosas para que el estadio esté en buenas condiciones. Una pena que por ahí no tengamos tanta presencia de público nada más”.
Fuente: Diario Epoca
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