No da grandes pasos, pero se nota signos de mejoría, noticias alentadoras para un equipo que había tocado fondo. Anoche en Once Unidos al calor de su gente regresó Luca Vildoza después de 70 días y la rotación se hizo larga para la media cancha nuevamente.
A pesar de la ausencia de Enzo Ruiz (con fiebre y síntomas de decaimiento) Leandro Ramella pudo rotar un poco mejor la resentida media cancha del puesto del base y escolta con el retorno de Luca Vildoza. Así el base juvenil Sansimoni jugó el segundo partido en el torneo con menos minutos en campo después de tener que soportar bancarse él solo los 40 minutos en la posición.
Por Bahía la ausencia por lesión de Pavel Ivanov no pudo ser saldada con una noche mágica de Lucio Redivo, quien si bien en el tercer cuarto metió tres triples (uno más espectacular que el otro) tuvo una noche normal en el resto del juego.
En los primeros compases del juego el equilibrio (11-9) se rompió cuando Quilmes pudo sacarle provecho a un par de contraataque tras las numerosas pérdidas (7) de Bahía, que parecía no salir en la continuidad del juego con Peñarol donde perdió 25 pelotas.
Whelan hacía un trabajo de desgaste sobre Baxley pero a la hora de atacar todo Bahía lucía apresurado y confundido y ni Fjellerup ni Corvalán podían ayudarlo. Al conjunto bahiense le costaba horrores poder entrar en la pintura del local, donde la defensa quilmeña estaba un paso adelante todo el tiempo. Controlando el rebote Quilmes sacó una distancia de 6 al cierre del cuarto (18-12).
Después de dos minutos de confusión (23-18) Quilmes logró encontrar bien parado a Alejandro Spalla en las esquinas para que el alero castigue con dos triples (31-20). Hubo un buen ingreso de Pancho Jasen que lentamente se tuvo que acomodar en el partido jugando en dupla con Levy porque Carter se cargó rápido de faltas.
El buen ingreso de Jasen le dio una mano a su equipo que solo podía atacar de frente y alejado del canasto. La zona pintada parecía vedada para la visita y solo propiedad del local. Con Baxley jugando a romper y pasar y sin volverse loco por sus puntos su trabajo fue altamente productivo. Quilmes se fue al descanso largo ganando 43-30 en posiblemente los mejores 20 minutos del torneo.
En el tercer cuarto mejoró Bahía Basket. Movió mejor el balón y pudo hacer ingresar la pelota al poste bajo. Otra vez Jasen fue un baluarte atrás y adelante jugando en dupla con Levy ya que Francisco Filippa y Ariel Ramos no entraron con buen pie. Levy se movió mucho mejor para anotar 8 puntos seguidos y apareció Lucio Redivo con tres triples sobre la marca y desde lejos para darle aire desde el perímetro a Bahía y achicar una diferencia de 16 a solo 6 puntos (49-43) con parcial 4-13.
Fue el momento que peor la pasó Quilmes donde perdió la brújula del partido, y otra vez Walter Baxley se puso en modo individual para apagar un poco el incendio (8 pts). Sobre el final del cuarto algunas combinaciones en el puente aéreo con Tayavek Galizzi más un triple de Vildoza le dieron la chance de cerrar mejor al local y mantener una distancia de 11 (64-53) para entrar el último cuarto pese a perder 21-23 el tercer parcial.
En el último cuarto Quilmes no pasó sobresaltos, un par de veces Bahía amagó con remontar la diferencia, con un triple de Whelan o acciones de dos + 1 pero el local siempre tuvo a mano una respuesta, como triples de Maciel y Cequeira o acciones de Walter Baxley para cerrar el resultado.
Fue una buena actuación del cervecero que desde su defensa construyó lo mejor. Fernando Calvi tuvo que volver a sumar minutos de alero (ante Juan Pablo Vaulet) y aunque el equipo debió sufrir la dinámica de un equipo rival más atlético, fue muy solidario para cerrar bien su canasto. Cequeira tuvo un gran partido en la marca de Redivo y Baxley jugó también para el equipo. Tayavek Galizzi atacó mejor el aro y Romero hizo pesar su experiencia en la pintura. En suma Quilmes tuvo 35 de los 84 puntos desde el banco de relevos, rotó bien y defendió mejor.
Bahía pecó de ineficacia perimetral 7/26 (26%) y Quilmes le cerró por completo el canasto (solo 8 rebotes ofensivos) para obligarlo a atacar a un solo tiro y encima con malos porcentajes. Salvo Whelan que jugó un partidazo y Redivo con Jasen que cumplieron bien, varios jugadores quedaron en deuda en una gira donde el equipo de Sepo Ginóbili se dedicó más a luchar los partidos que jugarlos.
Síntesis
Quilmes (84): Bruno Sansimoni 0, Walter Baxley 22, Alejandro Spalla 8, Maximiliano Maciel 9 y Tayavek Gallizzi 12 (FI); Luis Cequeira, Luca Vildoza, Diego Romero, Fernando Calvi. DT: Leandro Ramella
Bahía Basket (72): Gastón Whelan 14, Lucio Redivo 19, Juan Pablo Vaulet 9, Jamaal Levy 12 y Sean Carter 0 (FI); Máximo Fjellerup 2, Francisco Filippa 0, Hernán Jasen 12, Santiago Vaulet 0, Facundo Corvalán 2 y Ariel Ramos 2. DT: Sebastián Ginóbili
Parciales: 18-12, 43-30, 64-53 y 84-72
Árbitros: Sergio Tarifeño y Leonardo Zalazar
Estadio: Once Unidos (Mar del Plata)
Pablo Tosal
@pablotosal
Foto: lnb.com.ar
jp 09/12/2015
Desde que arranco la liga que no podía mirar un partido de quilmes tranquilo, hoy claramente defendió (probablemente la rotación mas larga ayuda), lejos esta de haber jugado un gran juego, pero creo que es el camino.
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