Pasó un nuevo hexagonal final y como siempre sucede, es saber si la licitación terminó cumpliendo las expectativas para cada club y los chicos que fueron parte de un evento tan importante para ellos y para el básquet en general. Sin dudas la respuesta es si. Un club pintorezco, con esa calidad de club de barrio que uno siempre siente y que le hace recordar de donde viene y de cuando jugó de chico. Comodidades a la hora de comer, con un salón inmenso para las comidas de cada delegación, un buen kiosco armadito, una buena cancha en el medio y de paso una pileta para aprovechar y refrescarse del calor duro con el cual cuenta Rosario y que sufrimos, pero al llegar al mismo Temperley se acababa.
Hay algo claro. Para licitar y ser parte de un evento tan importante se necesita mucha gente trabajando y dando vueltas colaborando en lo que sea. Sin dudas que en ese aspecto Temperley estuvo en su esplendor. Los cocineros a la orden del dia, con buenos platos para todos, humor, buena onda y despliegue para cada día con los chicos y con nosotros que fuimos uno más de la delegación. Dirigentes siempre presentes (no es un dato menor) y disfrutando de lo sucedido en cada momento. Atención para la prensa, las comodidades necesarias, sabiendo que las estadísticas en vivo y todo dato siempre es util y por suerte eso jamas falto.
Las noches al pasar cada encuentro, mesa de por medio, algo bueno de tomar, de comer y descansar de cada lleno de buen básquet. Buenas charlas acerca de la naranja y siempre con ese nerviosismo y expectativa tras cada partido y como terminaría todo. Cada partido colmó la cancha, y hubo necesidad de ampliar algunos sectores para que la gente pudiese entrar. El básquet siempre como centro, y con anécdotas de lujo y con personalidades, casi de Ariel Bernardini, todo un ícono dando vuelta como un ayudante más. Aprovechar y tener a Sebastián Uranga (Dt de la selección U15) y disfrutar de una buena charla de cafe con él y gente del propio club. Periodistas siempre presentes locales de Rosario con diferentes anécdotas de cada torneo local, de esas que siempre es lindo escuchar para entender como se vive el básquet en cada lugar.
¡Y que mejor que celebrarlo con un campeonato Argentino! Temperley jugando a un nivel formidable y los papas y dirigentes disfrutando de sus joyas y de los U15 que les recompensaron con básquet y un nivel bárbaro cada paso, cada trabajo que hicieron desde afuera todos los días. Hubo varios "Marco Giordano" fuera de la cancha, y eso es lo importante, como todos colaboraron y entendieron la idea del torneo y de como llevarla a cabo. Se sufrió, se disfrutó, y finalmente todo terminó casi a pedir de boca. Con un título bajo el brazos, con la hinchada cantando y a pura sonrisa "Que de la mano de los pendejos, toda la vuelta vamos a dar" se escuchó seguido y no fue para menos. Los pibes le dieron una sonrisa a todo el trabajo realizado. Todo va de la mano. Hubo campeones adentro y fuera de la cancha...
Jose Fiebig
@Josefiebig
Norberto 17/12/2015
Excelente cobertura, por una extraordinaria persona, que compartió a la par de todos los integrantes, (comisión, padres jugadores de todas las delegaciones y técnicos) momentos de alegría. Haber logrado ganar una final es muy importante, pero el desafío era poder estar a la altura y brindar todo lo posible a las delegaciones, por lo tanto, cumplir el objetivo de ver atendidos y bien a todos los planteles es un una hermosa satisfacción, gracias.
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