El hecho de haber enfrentado al equipo de Puerto Madryn ayuda tanto a los técnicos como a los periodistas para ir cerrando la idea de juego que tendrán ambos elencos como así también, en el estado de preparación en que se encuentran.
El Martes por la noche, en el Estadio “Hermanos Ciccioli”, más conocido como el predio “La Quinta” y con arbitrajes de Sedán y De Marchi el equipo “langostinero” superó al Local. Fue victoria ajustada (83 - 82), pero victoria al fin para la visita donde se destacó el aporte de Eduardo Villares que culminó con 20 al igual que Sánchez que terminó con 15. Por el celeste, 16 de Ojeda y 13 de Marina.
El encuentro se definió en los segundos finales, luego de una muy buena remontada del elenco dirigido por Gustavo De Benedetti que contó con mejor cierre ya que eligió bien sus ofensivas y lanzamientos.
El Nacional 82: Marina 13, Sureda 1, Jenkins 9, Alvarez 10, Ojeda 16 (inicial); Lucas Bianco 8, Mauro Bianco 0, Franco 11, Farias 6, Casemayor 8. Dt: Juan Garcia.
Conarpesa 83: Nóbile 8, Titarelli 11, Villares 20, Okosa 4, Sánchez 15 (inicial); Manari 8, Rasmusen 2, Iturria 7, Bochuck 8, Rivera 0. Dt: Gustavo De Benedetti.
Árbitros: Sedan y De Marchi
Cuartos: 21-23 / 41-43 / 59-55 / 82-83
Sin foraneo nuevamente
El jugador extranjero Bruce Jenkins fue desafectado del plantel de El Nacional. La dirigencia y el cuerpo técnico se encuentran ahora trabajando en la búsqueda de un nuevo foraneo para remplazarlo.
El pasado lo condena
Cuando se jugaban los primeros dos minutos del último cuarto, Horacio Sedan (A2) cansado de escuchar los reproches y gritos del técnico visitante, Gustavo de Benedetti, le marco una falta técnica y a continuación otra por la insistencia del exaltado coach. Seguido a esto y cortando el murmullo de los espectadores se alcanzó a escuchar la culminación de una frase chocante “…¡lo vas a descender también!”. El ex estudiantes no dudo en contestar el agravio diciendo “Pero andate a la ….”.
Todavía hay gente que cree que el culpable del descenso albo fue De Benedetti, y no, como lo es, una sumatoria de malas dirigencias que llevaron a la institución al borde de la desaparición de toda competencia. De igual manera no fue ética la contestación del ex Racing.
En el Casanova fue un picadito informal
Sin reloj, sin tanteador, sin árbitros y sin camisetas oficiales por el lado de Estudiantes se llevaron a cabo alrededor de 45 minutos de basket, los cuales se segmentaron en un cuarto de 10, otro de 20 y un último de 15.
El planteamiento de Conarpesa no fue tan rígido como el impuesto el día anterior ante el CEN, mientras que el albo intentó realizar la mayor cantidad de variantes posibles debido a la inmediatez del torneo y a la falta de compromisos antes del mismo.
El resultado final fue 77 a 54 para el dueño de casa aunque los sistemas bien realizados y el juego en conjunto, en este caso, estaban por encima del mismo.
Estudiantes 77: Sánchez 18, Scheines 3, Tagliotti 10, Reynoso 6, Lopresti 12 (inicial); Renzi 6, Canutti 2, Rotta 3, L. Mateo 17, Otero 0. Dt: Alejandro Alvarez.
Conarpesa 54: Nóbile 18, Titarelli 2, Villares 11, Sánchez 6, Okosa 7 (inicial); Iturria 4, Borchuck 2, Manari 2, Rasmusen 2, Rivera 0. Dt: Gustavo De Benedetti.
Parciales: 14-21 / 51-31 / 77-54
www.pickandroll.com.ar
el hecho de que estudiantes se haya ido al descenso es culpa pura de los dirigentes que no contralaron la actuacion del gerenciador y la pesima actuacion de jugadores y cuerpo tecnico. Lo de Debenedetti es una suma de fracasos, que por ejemplo en este caso formo un regular equipo avalando lo que pasaba en el club. Por eso es uno de los grandes culpables. Si en vez de plantear que todo estaba bien cuidando su quintita (llamese $) se hubiese alejado (en vez de que lo hecharan, la cosa seria diferente. <BR/>Hay cosas que se arreglan con trabajo. Otras no.
Responder
mauro 02/10/2003
El principal personaje desafortunado en su comentario, fué el árbitro. Ya que él con su comentario ignorante, lo único que logra es calentar mas la situación. En vez de bajar los descibeles utilizando correctamente el reglamento. Al cual al ábitro le cuesta mucho aferrarse por su afan desmedido de protagonismo. Tal como lo hace en el torneo local.
Responder