El eterno capitán Luis Scola acudió a su habitual franqueza, así como a la didáctica para explicar el contexto. En cuanto al encuentro, el interno sostuvo: “Tuvimos momentos muy buenos contra un equipo muy bueno. Sin embargo también redondeamos tramos malos, por lo cual tenemos que corregir varias cuestiones”.
A la hora de aportar su visión de las características del encuentro, el jugador de Toronto Raptors afirmó: “El nivel de exigencia fue muy parecido al que vamos a ver en los Juegos Olímpicos, pero con las diferencias lógicas entre un partido amistoso y uno oficial”.
Scola esbozó su opinión del rendimiento de Carlos Delfino, quien sumó minutos valiosos en lo personal, y manifestó: “Hoy jugó muy bien, tuvo momentos de muy buen nivel y otros en los que por ahí se le notó que físicamente le va a costar porque es evidente después de tres años y medio sin competir. Pero esto le vino muy bien a Carlos y a nosotros”.
Con la siempre atrayente atención sobre su figura, y el requerimiento de los medios de su palabra, Emanuel Ginóbiliexteriorizó su análisis. En relación con el cotejo ante los australianos, el escolta soltó: “Nos sirve para aprender, es una pena no haber ganado porque estábamos en una gran situación con una ventaja importante que sacamos en un momento. Nos quedamos sin jugo en algunos tramos del segundo tiempo, estuvimos lentos en las rotaciones defensivas, no estuvimos ágiles y estos equipos te la hacen pagar”.
El oriundo de Bahía Blanca encontró otra arista positiva, al focalizar en el banco de prueba que significa para los más jóvenes. “Nos da la posibilidad de que los más chicos vean como es esto de enfrentar a jugadores NBA, que son físicamente superiores”, razonó.
Otro de los que enfrentó los micrófonos fue el base Facundo Campazzo, quien coincidió en la diagnosis y aseveró: “Es un oponente muy duro, a nosotros no nos sobra mucho y tenemos que mejorar en los detalles porque van a hacer la diferencia”.
El talentoso armador se acopló en destacar los aspectos positivos y aseguró que en este momento no le preocupa nada en particular, ya que consideró que: “Es el momento para equivocarse, así como hay que ser inteligentes para que estos errores no estén en el futuro. Se hicieron muchas más cosas buenas que malas, hay que dar vuelta la página porque mañana tenemos otro rival complicado”.
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