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Argentina - USA: buscando la sorpresa olímpica

Dos premisas se juntan el mismo día en este partido:

1) El básquetbol es un deporte lógico
2) En el básquetbol no existen los imposibles

Los dos son ciertos aunque hoy todos nosotros estemos pendientes de la segunda premisa. De buscar la eventualidad, el “imposible”. Hay que jugar pensando que se puede, hay que predisponer el alma para que suceda los que pocos creen. Ir a buscar lo que depende de nosotros mismo y también lo que nos es ajeno.

La historia reciente de las redes sociales se llena de cartelitos que pregonan estos temas de ir a buscar lo imposible. Pero en verdad no se puede ganar al básquetbol solo con declaraciones de principios ni solo levantando el puño gritando sus deseos.

Las casas de apuestas no ven lejanos en cualquier posibilidad. Van de 7 a 1 hasta 26 a 1. Y en muchos casos son generosos. El mundo deportivo no considera posible que esta tarde gane Argentina.

Se ha dicho que lo esencial es invisible a los ojos y que solo se ve bien desde el corazón. Acaso para pensar en el partido haya que pensarlo tal como lo piensa un hincha: “no sé cómo pero ganamos”. Por aquello de la fe inquebrantable del hincha.

Ahora hay que busca el sustento. A ver que sale.

Si los números que forman un promedio estuvieran exentos de emociones podríamos trazar un parámetro más real pero al igual que yo muchos piensan que Estados Unidos dará un salto de calidad defensiva desde los cuartos de final.

Hasta acá jugaron defendiendo por momentos (3 minutos por cuarto) pero sin ser consistentes, sin ser ese equipo agresivo que mostraron en la previa. Ganaron los 5 partidos de la primera fase con una media de 81.4 pts en contra. Pueden ir a un ritmo ofensivo alto porque atacan con promedio de 104.8 pts.

Toman 69 tiros de campo por juego (42 dobles y 27 triples) con 34 libres por partido. Es decir tiran de promedio para hacer 199 puntos por juego y convierten el 52.6% del total de esas posibilidad.

Argentina, en tanto toma 70.2 tiros de campo por juego (37.8 dobles y 32.4 triples) con 25.2 libres por partido. Es decir tira de promedio para hacer 198 puntos por juego y convierte el 44.5% del total de esa posibilidad.

El buen lector ya podrá pensar que “se trata de una cuestión de porcentajes” Si la metemos, estamos en partido. Bueno si, es cierto, pero ¿cómo?.

En principio una rápida clase de teoría aplicada al básquet: no se defiende para que el rival no tire al aro. Se defiende para que el rival tire de la manera más incómoda posible, del lugar que no quiere, con los jugadores que no quieren. En eso consiste una buena defensa. Después existen los recuperos directos, las pérdidas del rival o el reloj de 24 segundos a favor.

El problema con Estados Unidos es que tienen muchas manos para tirar de tres, muchos penetradores, muchos dominadores del juego aéreo, poste bajo, juego de espaldas, contraataque. Contra ellos será un eterno taparse los pies para destaparse la cabeza. Ante un equipo con variantes para convertir buscar tapar sus vías de gol es difícil por eso lo que suele hacerse es elegir el veneno. ¿De qué manera quiero yo que USA me ataque?.

Por ejemplo Klay Thompson llevaba 2.8 puntos hasta el último juego de la fase de grupos. Le dieron los minutos, le soltaron la mano y clavo 30 puntos (7/13 en triples). Es como que taparan a Ginóbili pero Delfino haga 30. Tener respuestas constantes ante nuevos desafíos.

Salir a retar la mano de un jugador determinado será un riesgo necesario que tomar para no correr riesgos más estructurales: Bloquear su contraataque y su rebote ofensivo. Si este Dream Team tiene 27 triples por partido tirados con un 39.3% de acierto provocar a sus tiradores no es una buena idea.

Y el análisis más puntual dice que sus puntos de doble los hacen mayormente en transición. USA tiene un promedio de 20.6 puntos de “fast break” pero hay un dato aún mejor: suman 22.8 puntos de recuperos directos. Vale decir, si a esos números le sumamos 17 puntos de segunda chance. Su juego de dos puntos de ataque estacionado es muy poco, sus dobles los construyen en velocidad.

Por lo tanto obligarlos a jugar cinco contra cinco, no soltar el tiro y obligarlo a ir para abajo es una opción. El problema para los argentinos es que los equipos de la primera fase que lograron eso esperaron en el back court con un “arquero”. Gobert (2.16 mts) en Francia, Raduljica en Serbia (2.13 mts) y Bogut (2.13) en Australia. Nosotros carecemos de pivote. Mandarlos para abajo sin nadie para “atajarlos” allí es peligroso. Pero para eso existe la táctica en el básquet, para suplir carencias de personal.

Hasta acá está visto que el análisis de los números es desesperanzador, pero aún hay más. Son el equipos que más rebotes ofensivo toma por juego (14.2) en todo el torneo y anotan 17.2 pts de segunda chance. Ese es un número clave para bajar. Los puntos de contraataque y de segunda instancia para meterlos en el ámbito de los 90 puntos. Argentina tiene que lograr que USA llegue hasta 90-93 puntos como número final tener chance real de ganar.

Como el básquet es esencialmente un juego de vivos y la Generación Dorada de esto entiende todo habrá que testar la mano del rival de acuerdo a su intérprete. Por ejemplo Carmelo Anthony tiene peor porcentaje de dos puntos en 5-6 metros que tirando de 3. Esto es real, por lo tanto hay que invitarlo a tomar ese tiro. Para cada jugador hay un detalle de tiro que acá presentamos:




Como se ha visto detener el ataque de Estados Unidos con los intérpretes que tiene esta versión del Dream Team y especialmente su forma de juego requiere de varias aristas pero principalmente una que no hemos mencionado y ahora abre el segundo capítulo del análisis: Atacar bien para defender bien.

Las pérdidas que se convierten en puntos de recuperos, los rebotes de tiros errados que se convierten en puntos de Fast Break, depende de una organización ofensiva que juegue sin fisuras. Y Argentina tiene que tener su día especial al respecto.

Ahora que la selección ha perdido un par de partidos los hinchas han puesto el foco en la desorganización ofensiva. Pick and Roll no saca patente de “ya lo dijimos”… pero ya lo dijimos. Y es sencillo de explicar.

El entrenador tuvo que elegir con el material que tenía disponible cual era el sistema más conveniente. No es enamorarse de un sistema sino ponerlo a disposición de las herramientas que existen para aplicarlo. Por ejemplo hace 15 años teníamos en el poste bajo a Gabriel Fernández, Rubén Wolkowyski, Luis Scola y Fabricio Oberto y se podía jugar de una manera, pero ahora con Delia y Acuña junto a Scola de 36 años ¿se puede jugar igual?. Lógicamente que no.

Julio Lamas en el traje a medida que armó para Londres 2012 utilizó un sistema más complejo y mecanizado en la ofensiva. Pero Nocioni, Delfino, Scola y Manu también tenían 4 años menos. Y principalmente estaba Prigioni. Volvemos al punto cero: hacer lo mejor que se puede con lo que se tiene.

Con Campazzo y Laprovíttola, con jugadores dorados pero más veteranos, con jugadores jóvenes que tienen que tomar responsabilidades, la salida que el técnico le encontró es adaptar su estilo “Peñarol” en esta selección. A fuerza de ser sinceros es el equipo más “Sergio Hernández” que se pudo ver desde que está al frente de la selección. Tomar un tiro de tres puntos a la carrera de contraataque no es un recurso sino un sistema. Es así y no de otro modo porque si no sería peor.

Los temas que deben observar de ese tiro rápido en el segundo pase de la ofensiva es: como se arma el rebote ofensivo (después de China, Argentina es la segunda selección que menos reb off toma, solo 8.6 por juego) y cómo se acomoda el balance defensivo. El tiro rápido a la carrera también le quita recorrido a los hombres altos argentinos (Scola y Nocioni) que no suben vacíos la cancha para luego tener que bajar nuevamente a defender.

Cualquiera que vea como buena una propuesta de intercambios de tiros con Estados Unidos está reflexionando fuera del recipiente. No se trata jugar a ver quién tira más sino tomar el primer tiro claro, libre y sin contestar por la defensa rival que le queda a nuestra selección. Porque mecanizar muchos sistemas de cortinas nos llevan a un juego físico donde seríamos devorados por selecciones más jóvenes, atléticas y con mayor talla que la nuestra.

Después, claro está dependemos de los porcentajes. Así fue como contra Lituania hicimos un buen juego de pésimos porcentajes. Lamentablemente ante esos rivales no tenemos la chance de fallar sin pagarlo con la derrota. Ante USA muchísimo menos.

Y por último una vez que se minimizan los errores de pérdidas y se lanza al canasto, predisponer el 100% de la energía en armar rápido el bloque defensivo, contener el contraataque, obligarlos a jugar estacionado y evaluar quien queremos que nos tire, desde donde y quien no debe tocarla. Allí el foco sobre el scouting tiene que ser total y la concentración altísima. De otro modo será comida sencilla de la selección norteamericana.

A la Argentina cualquier selección que le rote con 10 jugadores de similares aptitudes ya le queda incómoda porque tendrá un ritmo defensivo y de fricción muy alto. Les es preferible enfrentar a selecciones europeas, más lentas, más pesadas. La dinámica del Dream Team es por momentos asfixiantes, incontestable. Pero hay que jugar contra eso también.

Sobre todo porque esa dinámica que USA quiere meter en defensa los lleva a ser desprolijos. En varios partidos los jugadores norteamericanos demostraron que por ir rápido corren detrás del balón ante selecciones que saben mover la pelota.

Nada de lo que fue escrito acá es una novedad, está a la vista de todos pero Estados Unidos sigue ganando igual, es decir, en la cancha la ejecución de los jugadores soluciona todo. Los NBA que representan a USA son de una calidad suprema. Y mucho lo terminan resolviendo por condiciones naturales riéndose de este análisis, de otros análisis y de todos.

Hasta que algún día choquen la nave de nuevo. Para que se ría el resto del mundo, como ya ocurrió dos veces con la Argentina (2002 y 2004) y soñemos con repetir esa sonrisa. ¡Porque se puede!

Pablo Tosal
@pablotosal

COMENTARIOS (3)

Cordobes 17/08/2016

Hoy puede ser el ultimo partido de Manu, Chapu y (ojala que no) de Scola.. Pase lo que pase, GRACIAS POR TANTO!!

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Agustín 17/08/2016

Notable texto. Vamos Argentina.

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kevin 17/08/2016

Lo que mas deseo mas alla del resultado es que nuestros heroes hagan un papel digno resistan y no se dejen pasar por encima. Que no se queden atornillados en el piso con un base desesperado que no sabe a quien pasarla porque todos estan petrificados.Y por favor hacer volar la pelota constantemente y BASTA DE PIQUES AL PEDOOOOO ESCUCHASTE LAPRO?

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LA VERDAD DE LA MILANESA 17/08/2016

Siiiii Quedate tranquilo. Te RE-ESCUCHO. Había algo que lo preocupaba y no sabía que era.....menos mal que estás vos para despejarle las dudas. Te esta eternamente agradecido.

kevin 17/08/2016

la necedad es hermana gemela de la estupidez

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