Aunque el pionero fue el bonaerense Juan Domingo de la Cruz con su llegada al FC Barcelona en la década de los 70, Baskonia ha sido el equipo español que más talento ha exportado desde tierras argentinas.
El primer argentino en aterrizar en Vitoria fue Marcelo Nicola, uno de los jugadores más talentosos de esa camada previa a la Generación Dorada. El actual entrenador asistente del Hapoel Jerusalén llegó a la cantera baskonista en 1989 con 18 años como un gran diamante en bruto y debutaría dos años más tarde, jugando siete temporadas y consiguiendo una Copa de Europa y una Copa del Rey con la entidad vasca.
Juan Alberto Espil sería el siguiente en llegar a Vitoria. El escolta bahíense llegó en 1996 procedente del Atenas cordobés y se convertiría en uno de los tiradores más fiables que ha visto la ACB en toda su historia. Cuatro temporadas con Baskonia, consiguiendo un subcampeonato de ACB y una Copa del Rey y continuando más tarde su carrera en España con los equipos de Joventut, Manresa, Tenerife y Bilbao.
Aunque su camino hacia Vitoria no fue directo desde Argentina y tuvo una temporada de escala en Olympiakos, el cordobés Fabricio Oberto sería el siguiente en fichar por Baskonia en 1999 y estaría dos temporadas con los vitorianos. El pívot formó parte de aquel equipo que llegó a la final de la Euroliga en 2001 y levantó los títulos de la ACB y la Copa del Rey en 2002, en aquel histórico equipo al mando de Dusko Ivanovic y con jugadores que son leyendas baskonistas como Andrés Nocioni y Luis Scola. Al igual que Oberto, el “Chapu” también llegó en 1999 y Luifa sólo un año más tarde en 2000, aunque ya llevaba dos temporadas en España deslumbrando en Gijón. El único de los tres que tuvo ida y vuelta fue el santafesino, que tras sus ocho temporadas en la NBA, volvió dos años a Vitoria antes de su actual destino en el Real Madrid.
1999 también sería el año de debut de Pablo Prigioni en la ACB, aunque tuvieron que pasar cuatro años entre Fuenlabrada y Alicante antes de que se vistiera la camiseta baskonista en 2003. La “historia de amor” entre Baskonia y el base riotercerense es quizás la más notable. La ACB de 2008, tres Copas del Rey y cuatro Supercopas de España son los títulos de Prigioni en sus tres etapas como baskonista, aunque todos estos entorchados pertenecen al la primera etapa entre 2003 y 2009. Tras sus cuatro temporadas en la NBA, el base volvía hace unos días como refuerzo del equipo vitoriano y anunciaba su retirada poco después. “La cabeza y el cuerpo no quieren saber nada más de esto”, explicaba el ya ex-jugador, que había vuelto a retirarse a la que fue su casa durante tantos años y donde tan querido se ha sentido y se sigue sintiendo.
Una temporada para Hugo Sconochini y Gabriel Fernández en la 2001-02, al siguiente lo hizo Rubén Wolkowyski con la temporada ya empezada y luego Roberto Gabini estaría algo más de un curso con los baskonistas entre 2003 y 2005.
Al rebufo de los Scola, Prigioni y Nocioni y con el intento de Baskonia de repetir la historia, llegaron en 2006 a Vitoria unos jóvenes Ariel Eslava y Matías Sandes, cuyo talento no terminó de explotar en la entidad baskonista y sin los minutos necesarios y con pasos posteriores a otros equipos españoles, terminaron volviendo a la Liga Nacional.
Después de su paso por Fuenlabrada, Unicaja y la NBA, Walter Herrmann tuvo un breve paso por Baskonia durante la temporada 2009-10 antes de retirarse de los focos mediáticos a su Venado Tuerto natal. Uno de los últimos argentinos en vestir de baskonista ha sido Leo Mainoldi, siendo Vitoria la última ciudad española en sus 12 años de carrera ACB.
Ahora, es el turno de Nicolás Laprovittola. El base de Morón buscará añadir su nombre con letras de oro a la lista de argentinos que destacaron en Vitoria. Con el precedente tan cercano de Pablo Prigioni, las comparaciones no faltarán, pero a buen seguro que el bueno de Nico hará un buen papel en los meses que tiene por delante como baskonista.
Por Daniel Merida (@baloncestero)
Especial para www.pickandroll.com.ar
torturas Deck 19/01/2017
Hola amigos en la nota debiera decir que el Baskonia IMPORTO talento Argentino, no EXPORTO...
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