Cuatro entrenadores de gran experiencia dirigen a los cuatro equipos que se disputarán este fin de semana la Final Four en la ciudad venezolana de Barquisimeto. Cuatro nacionalidades diferentes en cuatro equipos de cuatro países con un mismo objetivo: ser campeón de la Liga de las Américas.
Paco Olmos (Fuerza Regia): El entrenador español cumple su quinta temporada en el baloncesto de Latinoamérica y, al igual que su equipo, debutó en la Liga de las Américas en la presente edición. Después del subcampeonato conseguido con Vaqueros de Bayamón en el pasado BSN, Olmos se enfrenta a su mejor campaña al otro lado del Atlántico, con un Fuerza Regia que ha sido un líder arrollador en la fase regular de México, está invicto en sus seis partidos en la Liga de las Américas y a la vuelta de la Final Four disputará la final en su país.
Tras su título en la ULEB Cup y subcampeonato de ACB con Valencia Basket, el ascenso con Menorca o las medallas conseguidas con la selección de Puerto Rico, esta Final Four es sin duda uno de los momentos más importantes en la carrera del entrenador valenciano.
Sepo Ginobili (Bahía Basket): En su corta carrera como entrenador, el mediano de los hermanos Ginobili se encuentra en un reto que puede significar una nueva confirmación del proyecto deportivo de Bahía Basket, con Pepe Sánchez dirigiendo desde los despachos y Sepo Ginobili y Alejandro Montecchia dirigiendo desde la cancha.
"Es un plan a largo plazo, con todo lo que eso significa en este país. Permite que exista un proceso de aprendizaje, con aciertos y errores. Amo este juego, soy de la ciudad y tengo un profundo respeto por esta profesión. Entregaré todo para estar a la altura", explicaba Sebastián Ginobili en abril de 2013 en su presentación como entrenador de Bahía Basket. Desde entonces, ha cumplido con todas esas premisas, ha hecho crecer a un equipo lleno de jugadores jóvenes y esta temporada llevó al equipo hasta la final de la Liga Sudamericana y ahora hasta la Final Four de Liga de las Américas.
Jorge Arrieta (Guaros de Lara): Cuando un entrenador ha conseguido un importante número de éxitos con un equipo, su sombra alargada y la presión se suele extender hasta su sucesor en el banquillo. Tras el corto periplo de Iván Déniz, Jorge Arrieta llegó para asumir el relevo de Néstor "Che" García y hasta ahora todo han sido buenas sensaciones bajo el mando del entrenador zuliano.
Después de haber conseguido la Liga de las Américas y la Copa Intercontinental, el equipo de Barquisimeto optó por la elección de un entrenador que conocía la casa y que cuenta en su currículum con tres títulos de liga en Venezuela.
"Jorge ya estuvo con nosotros en otra etapa, tuve la oportunidad de conocerlo en ese entonces, sé que le ha ido bien con otros equipos en la Liga", explicaba hace unas semanas el pívot Gregory Echenique. "Pienso que lo respetan bastante y el hecho de que sea venezolano ayuda un poco porque conoce como pensamos y eso hará que nos adaptemos de manera más rápida a su estilo de juego"
Nelson Colón (Leones de Ponce): Uno de los entrenadores más jóvenes y prometedores del baloncesto boricua cumple su quinta temporada al frente del equipo de la Perla del Sur. Con dos títulos del BSN y tres finales, Colón querrá redondear su participación en una Liga de las Américas para que fue invitado por la sanción a los equipos brasileños.
"Vamos confiados en el sentido de que hemos trabajado duro. Creo que el grupo ha crecido. No es el mismo que empezó", explicó Nelson Colón en declaraciones a El Nuevo Día. "Sentimos que tenemos una gran oportunidad para competir en esta última parte del Liga de las Américas. Nos toca el juego difícil. Es contra Venezuela en Venezuela. Todos tenemos una idea de lo que vamos a encontrar. Así que estamos locos por llegar y pasar por esta experiencia"
Por Daniel Mérida (@baloncestero)
Cortesía de CanchaLatina.com
oriverde 16/03/2017
como no me gusta la gente que habla con el diario del lunes, quiero decir que el arbitraje va a ser determinante, lo visto hasta ahora ha sido , deplorable; espero equivocarme y sabre reconocerlo pero lo dudo mucho.
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