El Argentino U17 dejó mucha tela para cortar en materia de juego, jugadores y proyección. Ganar no lo es todo, o al menos eso es lo que piensan algunos, no todos. Ese vendría a ser el primer problema. Cañada mostró excelentes prospectos en dos camadas de las cuales se espera el resurgir del básquet nacional. Tanto la 2000 como la 2001 brillaron individualmente, aunque en conjunto las cosas no fueron tan prósperas. Doce selecciones que mostraron calidad, buenas intenciones, planteles de nivel, y que en definitiva lo cerraron los dos mejores elencos. Más allá de lo presentado inicialmente, no deja de ser positivo lo que elaboraron algunas provincias, y las sorpresas que siempre aparecen y dejan saldos positivos para el análisis.
El torneo presentó un serio aspirante, y uno o dos elencos que podían generarle problemas. Está claro a quien me estoy refiriendo. Santa Fe como primer candidato, y Buenos Aires más Córdoba como posibilidades concretas. Podía avizorarse luego Entre Ríos, y más lejos una paridad considerable, pero sin aspirar realmente a campeonar. Por suerte, muchos rompieron el prode, e hicieron del torneo, un campeonato realmente apasionante y con series definitorias de tensión y de disfrute para quien estaba afuera. Diferentes selecciones que llenaron los ojos, y otras a las cuales les costó hacer pie más allá de su buen plantel.
Para arrancar, podemos tomar los casos de provincias que mostraron progresos. Neuquén, Corrientes y Chaco fueron el tridente sorpresivo y que generó que muchos vayan a verlos jugar. Zonas donde la altura no sobresale, pero sí la intensidad, talento y mucha defensa para tratar de esconder las limitaciones de cada uno. Chaco, que viene teniendo buenas camadas, por fin lo confirmó en resultados. Tras un arranque muy cuesta arriba, ganó la última jornada, y generó el batacazo venciendo a Entre Ríos en playoffs. Entre sus figuras, fue sobresaliente lo de Dario Sidelsky. El base de Quilmes funcionó al máximo, y encontró en Spagnoli y Velis variantes claras para terminar cuartos, y por segundos no ser podio en el torneo.
Neuquén, más allá de no quedar quinto, tuvo una buena propuesta de juego. Sumamente intenso, defendiendo bien, ccon una idea adelante y provocando problemas para cualquiera. Apenas quedó segundo detrás de Entre Ríos, y casi provoca el cimbronazo sacando a Córdoba. Sus limitaciones ofensivas, sumado a la lesión de Bravo complicaron los planes. Aún así, mostró facultades individuales. Santiago Frola desde la base, y ni hablar su joya U15, Juan Conte Grand. La confianza de parte de Romero con el escolta fue vital. Clave en todo el torneo, y siendo la miradas de muchos. Corrientes fue otro que metió la cola. Un elenco de mucho vértigo, con mucho gol, sin tanto juego, pero jugadores en alto nivel. Le creó dolores de cabeza a Santa Fe, mostrando las primeras grietas del gran candidato. Leonardo Solis en la base, y Rolando Vallejos como interno tirador, se ganaron su lugar, y una gran consideración para ser marcados y tratar de anularlos.
Hubo elencos que mostraron buenas individualidades simplemente. Costó ver buenas propuestas, solidez y claridad en las ofensivas. Entre Ríos padeció el torneo, con una camada de altibajos en sus segundo año, y apostando a sus pollos U16 (Scacchi - Varisco). Sumamente irregular, con muchos vaivenes y terminando por debajo de las expectativas en Cañada. FeBAMBA sigue sin ocultar sus problemas para ser protagonista. Llevó a Santa Fe una camada muy prometedora, pero se quedó en eso. Utilizó pocas variantes, no hubo gran química dentro de la cancha, y las variantes no llegaron. Jugadores en posiciones cambiadas, y teniendo que hacer cosas a las cuales no están acostumbrados. Pablo Aaron demostró su calidad, pero la lesión de Gago, y los vaivenes del resto lo dejaron lejos de pelear en el Top4.
Córdoba es posiblemente un caso similar. Poca gente alta, y muchos perimetrales dentro de su roster. Bolmaro como escandalosa figura del equipo y del torneo. Un jugadores con excelente mecánica, largo, goleador, y elegante para jugar y colaborar en diferentes apartados. Provincia con una propuesta colectiva muy buena, y que a la larga lo llevó a ser el campeón. Juan De La Fuente tuvo su torneo de resurrección tras algunas dudas que generó. Lo mismo para Juan Marini y Fausto Ruesga. Los dos jugadores de Bahía Basket brillaron, se vieron con recursos en ambos lados y en alza respecto a su juego. ¿Que paso con Santa Fe? Definitivamente fue un caso particular. Un elenco lleno de figuras, de altura, y con todo para coronarse. Se priorizó jugar con un conjunto bajo, doble base, escoltas en otras posiciones y con escasa rotación. Quedaron fuera internos con posibilidades de poder ver, y otros que fueron parte del equipo, pero prácticamente no ingresaron. Giordano con una fantástica confirmación de su nivel, lo mismo para Farabello y Eydallin en su faz anotadora.
En conclusión ¿Ganar y proyectar van de la mano o a contramano? Jugadores altos que no pisaron la cancha. Bihurriet fue un claro ejemplo, lo propio con Chapero, que con un gran progreso se lo vio falto de confianza. Sangoy en Córdoba, que si bien, por un lado dicen que no juega en su equipo y está falto de competitividad, se habla del otro lado de un gran progreso en la selección ¿Cuanto le sirvió el torneo a los entrenadores CABB? Hay dos claros interrogantes, en los cuales muchas partes deberán ponerse de acuerdo ¿Los Argentinos sirven para proyectar o no se puede en una semana? ¿Es solo ir a ganar a como de lugar? Alguien dentro de la CABB me hizo ver un dato que no es menor. En ADEO hay una gigantografía del plantel campeón de U13, y a su vez, del otro costado los hermanos Brussino como emblemas salidos del club ¿Cual de las dos fotos es mas grande? La del campeón U13. ¿Ese será nuestro pensamiento? ¿Agigantar torneos por sobre proyecciones? Insisto. Hubo mucha calidad, jugadores de brillo y dos camadas que ilusionan. A su vez interrogantes que se deberán aclarar para no tropezar en el camino, y seguir por la misma línea. No sería mala idea que clubes, federaciones y CABB se pongan de acuerdo para ir por el mismo tramo, sino difícilmente se de el salto de calidad que todos queremos y esperamos. Todo por jugar y mucho por recorrer, estamos por buen camino, dependerá de todos no derrapar...
Enviado especial a Santa Fe, José Fiebig
@Josefiebig
No. Rotundamente no. La competencia sirve para medirnos. El desarrollo incluye jugar con chicos con proyeccion y resignar resultados por su maduracion. El enseñarles a ganar si, pero nunca resignando formacion , el ganar es parte del como, pero hoy se juega con chicos sin proyeccion para ganar en el moment y no en el futuro
ResponderCreo que en formativas siempre tienen que jugar los altos, los proyectos, y no correr posiciones de manera negativa, me refiero a no poner un alero de 1,95 mts a jugar de 4, eso es un desproposito y le hace un flaco favor al chico y al futuro de la seleccion. Ahora si tenemos un chico de 2,03 mts que siente el juego de base, por supuesto que si, en este caso seria correr posicion de manera positiva, me refiero a que siempre hay que tener la vista a largo plazo, siempre hay que formar chicos como si todos tuvieran chances reales de jugar en europa o en la seleccion, y esto implica respetar los canones internacionels de alturas minimas para cada posicion.
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GD 03/05/2017
Muy buena nota!!! Coincido que en una semana no se puede ver todo el potencial de los pibes, que hay que hacer jugar a los altos y que hay que dejar de correr posiciones. Queda claro que en los últimos años, poner a jugar a bases por escoltas, aleros por ala-pivote y ala-pivotes por pivotes fue una de las tantas razones que nos llevó a la escasez de jugadores que han salido en los últimos 10 años de nivel internacional. No pongamos más palos en las ruedas y aprovechemos estas nuevas camadas que tienen potencial.
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