Los pupilos de Pablo Laso se encomendaron a su jugador más joven, el talento de Doncic, y a uno de sus veteranos, Ayón, que dio un auténtico clínic bajo los aros, pasa salir victoriosos del Sinan Erdem Dome, escenario de sobra conocido para el esloveno, quien triunfó con su selección en el reciente Eurobasket.
El buen arranque tuvo mucho que ver para provocar la desazón de los turcos, liderados por Errick McCollum y Ricky Ledo, sobre todo cuando Ayón cogía el balón. El mexicano se vistió de titán para establecer las primeras ventajas de los merengues (19-28). La seriedad defensiva y el dominio en el rebote permitieron estirar esta renta.
Jaycee Carroll no tuvo problemas en sumarse a la fiesta, pero fue Randolph quien quiso ganar protagonismo desde el perímetro. Hasta nueve puntos tuvo el Real Madrid de ventaja cuando sonó el bocinazo del segundo cuarto (36-45). Fue tras la reanudación cuando tres acciones consecutivas de McCollum cambiaron el signo del partido.
El Real Madrid vio cómo los de Velimir Perasovic pudieron comprometer el encuentro (60-62) en cinco minutos de cortocircuito. Laso volvió a meter a Ayón en pista y no defraudó. Doncic, más de lo mismo, terminó por resolver la papeleta de un Madrid que aprovechó a la perfección la calidad de minutos que le dio Fabien Causeur y el debut de Chasson Randle, que poco pudo aportar tras cometer tres faltas en apenas tres minutos.
De esta forma, y con varias canastas más de Luka Doncic, el Real Madrid cerró la primera victoria de la temporada en una cancha que no resulta nada sencilla. Su próximo envite será el jueves 19 de octubre ante el CSKA Moscú, un partido muy especial para Sergio Rodríguez, que volverá a la que fue su casa durante las últimas temporadas antes de marcharse a la NBA.
El argentino Facundo Campazzo terminó con 6 punto (2/6 en triples), 3 rebotes, 2 perdidas en 18:19 minutos de juego.
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