“No pude disfrutar el clásico”

• Pablo Tosal (ptosal@pickandroll.com.ar)
• 18/03/2004
• (29 comentarios )

Javier “Pipa” Bianchelli hablo de lo que pasó y podría pasar con su equipo de cara al futuro. En la previa del clásico que una espada se erguía sobre su cuello, que no podía perder, por eso relata que: “Cuando faltaba 50 segundos para que termine recién me aflojé, no pude disfrutar el partido, ni el clima, ni el marco” contó a Pick and Roll el entrenador.

Javier, abierto y franco como siempre no tiene empacho en admitir algunos errores “No me podía permitir una derrota, por la manera que perdimos el anterior, por eso viví con tanta intensidad el partido, hasta me olvidé de poner a los juveniles!!” y mientras decía esto se agarró la cabeza como si hubiese cometido un pecado.

Luego agrega: “En un minuto o dos del tercer cuarto o en el final del partido tendría que haber sacado por ejemplo a Prego porque se merecía el aplauso y poner a los juveniles, pero yo seguía enchufado en el partido”.

Así de simple es Javier, suma minutos tras minuto de experiencia en la Liga y se sacó el gusto enorme de ganar un clásico. Además su equipo respondió a la expectativa que la gente había brindado.

“Me gusto mucho la intensidad con que jugamos. Fue terrible, Juan Pablo (Sánchez) se lastimó, fue al banco, se puso a saltar y me dijo, - ya estoy para entrar – y ganábamos por veinte!! todos tenían ganas de jugar, el “Lobito”, Prego, “Buba”, rescato la intensidad y la inteligencia” comentó el coach.

Más adelante ejemplifico diciendo que: “En la previa del partido había marcado como dato fundamental la concentración en el juego para hacer lo que nos convenía, así ellos fueran a las piñas, ganemos por 10 o ellos tengan una arremetida, no podíamos perder de vista el objetivo único que era ganar, fuimos inteligentes para dominar las diferentes situaciones.”

De todas manera ganar un clásico es siempre especial, y si no lo disfrutó durante el desarrollo por lo menos le queda la linda sensación del reconocimiento: “Ayer fuimos a tomar un café al shopping con un amigo y la gente que me saludaba era increíble, yo me moría de vergüenza, me decían un montón de cosas, menos mal que ganamos.”

Con las victorias comienzan también las presiones y las apetencias de la gente y de ellos mismos para seguir subiendo. Quilmes es hoy el segundo mejor equipo de la segunda fase a solo una victoria de Boca Juniors. No obstante este dato objetivo de la realidad no le hace pensar a Bianchelli que deban estar en la final.

“Cuando miro la tabla y veo que solo Boca ganó más que nosotros, la verdad no me provoca mucho – reconoce Javier - , porque el equipo no se armó para ser campeón, pero a veces me levanto por la mañana y pienso que no tenemos menos que nadie, y que podemos ir más para arriba.

Cuando estoy entrenando en Once Unidos sueño con poder jugar una semifinal en ese estadio…sería maravilloso, no obstante hoy tenemos como objetivo quedar entre los cuatro primeros.”

Bianchelli dice que hoy Quilmes no esta para campeón, y soñar con esa posibilidad es difícil, y ante la repregunta de quien tiene más que Quilmes, Javier hace una larga pausa y piensa antes de contestar: “Ahora que tenemos a Bubacar Aw, no se si Comodoro tiene más que nosotros, o La Plata, estamos todos parejos”.

El café se enfrió y la charla giró en lugares comunes, anécdotas y en todo momento, “Pipa” Bianchelli no deja de reconocer que vive una experiencia nueva tras o otra. La derrota con Boca, Atenas y el clásico anterior lo dejaron muy marcado, inclusive reconoce errores propios. Su autocrítica es muy fuerte y sin dudas positiva.

“Cuando asumí después del alejamiento de Pepiche, todo era nuevo, porque yo había jugado solo play off el año pasado, y hasta me parecía raro cambiar de ciudad de un viernes a un domingo, analizar videos de equipos diferentes” confesó Javier.

Hoy reconoce que sus años de juveniles en el equipo de liga de Quilmes le sirvió para saber las cosas del vestuario: “Me acuerdo cuando nos dirigía el Huevo y estaban en el equipo De la Fuente y demás, había cada nene!!, yo observaba mucho el comportamiento y eso me ayuda hoy a entender hoy al jugador”.

En vista al futuro, Javier no quiere aventurar nada: “Si ganamos cuatro de los cinco que restan quedamos entre los cuatro primeros (Le queda Ferro, GyE (CR) y GELP de visitante y Argentino - Pico de local), si clasificamos, bueno después veremos que pasa, pero sueño con jugar una semifinal en el estadio de Once Unidos con el calor de la gente ahí”.

No esta de más la ilusión de Bianchelli. Detrás de él hay todo un pueblo que sueña con lo mismo. Y quizás una noticia aún mejor. Quilmes tiene con qué.

Pablo Tosal
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