Egipto derrotó a Nueva Zelanda en el encuentro inicial del Grupo C. Hassan con 14 pts fue el goleador, seguido de Hanafi con 9 pts y 9 reb. En los oceánicos, Lepou fue el mejor con 13 unidades.
El partido fue trabado y muy luchado. Egipto mostró mucha potencia física, principalmente con Khalifa y Hanafi para sobrecargar el aro del rival. Nueva Zelanda con pocas ideas y claridad para atacar fuerte el aro egipcio. Ambos apostaron en determinados momentos a una zona combinada, donde Egipto resolvió mejor, aún en un marco intenso y con poco gol. Se adelantó 8 – 4 y 12 – 7 respectivamente, ante la desprolijidad de los neocelandeses. El cuadro oceánico totalmente fuera de foco ofensivamente (1-7t2, 1-8t3), y peleando más que jugando. Egipto desaprovechó por momentos su cualidad defensiva, y también costó anotar con consistencia. No abusó del triple, pero no tuvo eficacia a corta distancia (5-22tdc). De esa forma, cerró Egipto 14 – 11 al frente.
Egipto tuvo un comienzo formidable se segundo cuarto. Tomó mejores lanzamientos, siguió con una enorme supremacía en los rebotes, y se escapó en el marcador. Mohamed (6) fue determinante adelante, donde Egipto pudo correr, tener velocidad y mayor determinación en sus ofensivas. Nueza Zelanda totalmente perdido, mantuvo sus yerros ofensivos, y sin variantes para atacar con solidez. Egipto se mantuvo firme atrás, y estampó un parcial de 15 – 4 para tomar las riendas 29 – 15 casi sin problemas. Nueva Zelanda sin calidad ni juego en sus ataques (1-16t3), y padeció completamente el cierre de la primera mitad. Egipto bajó sus porcentajes, tuvo poco juego elaborado y no volvió a correr, aunque cerró 33 – 19.
Nueva Zelanda trató de recuperarse. Volvió a sobrecargar muy bien el aro ajeno, tuvo mucho potencia, pero mantuvo su pobreza en porcentajes. Rissetto impuso su agresividad física, pero el perímetro poco acompañó. Nueva Zelanda achicó con el correr de los minutos, apoyado en otra intensidad y determinación. Ajustó mejor en defensa, Lepou fue solución y en velocidad se colocó solamente 37 – 31 debajo con un arranque de 12 – 4 en medio periodo. Egipto comenzó a chocar seguido, fue bien contenido en los cristales, le costó revertir la bola, y perdió precisión. Nueva Zelanda con mucha confianza, más claro para transportar la bola y generar espacios. De esa forma, se colocó en juego 41 – 38 simplemente en los minutos finales. Hanafi sacó de la galera un doble más bonus, aunque Egipto tuvo problemas en su cristal. Nueva Zelanda volvió a dejar pasar chances, malogró oportunidades, y los egipcios cerraron 46 – 40.
Egipto volvió a sacar ventajas. Mostró mayor efectividad, variantes y pasó bien la bola. Nueva Zelanda llegó tarde a los ajustes, no tuvo efectividad a larga distancia, y volvió a quedar muy por debajo. Khalifa volvió a ser importante, sumado al aporte de Hassan para sacar ventajas. Egipto tomó vuelo, aceleró, y tras un bombazo tomó renta de 53 – 42. El juego fue muy duro, luchado, donde Nueva Zelanda no tuvo claridad ni supo como atacar al rival. Un bombazo de Dance aplacó al rival, aunque Egipto manejó de todas formas el compromiso. Sobrecargó el cristal ajeno, y tomó renta de ocho (56 – 48) ingresando a los tres minutos finales. Nueva Zelanda completamente nulo en su ofensiva (24% de campo, 3-28t3) quedó con las manos vacías. Egipto cortó línea de pase, recuperó balones claves y resolvió su encuentro inicial.
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