Comunicaciones tuvo un primer cuarto soñado, por lo menos gran parte de ese segmento lo jugó a un altísimo nivel, con un juego intenso en ambos costados de la cancha. El equipo local fue una maquinita en ataque, sobre todo aprovechando su efectividad de tres puntos (6/10 en período inicial) y una buena conducción de Luciano Guerra desde la base, aportando puntos (8), pero principalmente siendo el responsable de la dinámica ofensiva y de encontrar a sus compañeros mejor ubicados para el lanzamiento.
Sin embargo, y al margen de la sólida tarea en el aro del frente, Comu no descuidaba el propio y eso se notó en cada salida de La Unión, que no logró encontrar comodidad ni en cinco contra cinco ni conseguir puntos en salida rápida, algo que hace bien el equipo formoseño. Esa falta de confianza se tradujo den pérdidas para la visita (5 en el primer cuarto) y el conjunto dirigido por Ariel Rearte tomó una máxima de veinte puntos en el partido (29-9 a falta de 2min26seg para el final del segmento) y se fue al descanso corto con una ventaja de 32-15.
Fue a la vuelta de ese receso que La Unión pareció acusar el golpe y salir de su mal momento para buscar soluciones en ataque. Soluciones que las aportó Maldonado con un buen inicio de segundo cuarto, con 8 puntos en los primeros cuatro minutos de ese período y una escalada que hacía soñar al conjunto formoseño, muchas veces situaciones forzadas, pero efectivas que lograban bajar la diferencia en el marcador.
La Unión llegó a estar doce puntos abajo (37-25) y con mucho esfuerzo el visitante intentó mantener ese trabajo. Sin embargo, el equipo de Mercedes aceleró otra vez, volviendo a lo que lo había alimentado en el primer cuarto y en la segunda mitad del segmento comenzó nuevamente a alejarse en los números, con Davis y Crawford tomando mayor protagonismo en los ataques, llegando a una diferencia de 26 (56-30) sin descuidar su efectividad de larga distancia (11/16-68 por ciento en la primera mitad). Así, el dueño de casa fue tejiendo sus fundamentos y cerró las cifras del primer tiempo 58-33.
Al retorno de los vestuarios, Comunicaciones se supo dominador y que podría trabajar con la diferencia que había tomado en la primera parte del juego, aunque no conforme con esto, siguió con su juego asociado aceitado por momentos y llegó a estira la ventaja a 32 puntos (65-33) tras un parcial inicial de 7-0. Esto se sumó a la defensa que volvió a ser determinante por ese entonces para torcer la balanza del juego totalmente a su favor.
La Unión, a esa altura, ya era un equipo que apostaba a su amor propio y su fuerza para llegar al cesto local, aunque con poco juego y sin esquema asociado que lograra inquietar a fuertemente a su rival. Mientras Guerra seguía liderando a su equipo, Maldonado se hizo cargo del ataque de la visita y así los dirigidos por Daniel Cano fueron limando la diferencia con un parcial de 2-15 hasta bajar la historia a 19 puntos (67-48).
Pero ese aluvión formoseño no se pudo mantener por largo tiempo y La Unión no logró mantener esa intensidad ni defensiva, ni mucho menos, en ataque. Parecía ser que cada vez que los de Cano se disponían a hacer su juego, Comunicaciones volvía a tomar aire y a elevar la vara nuevamente. Así fue que los de Mercedes aceleraron y se fueron al último descanso corto arriba por 20 (73 a 53).
En los diez minutos finales, ya Comunicaciones había perdido algo de intensidad y parecía algo obvio con la diferencia tomada. Sin poder relajarse, pero sabiendo que su rival tampoco tenía ya las fuerzas de los segmentos anteriores para torcer la historia del partido, planteó el último cuarto con un juego menos agresivo defensivamente, pero sí con posesiones que apostaron a consumir segundos del juego.
A esa altura, Guerra había resignado algo de protagonismo en su tarea anotadora (terminó el juego con 18 puntos) y Davis pasó a comandar ese rol (goleador del partido con 21) y Comu fue sentenciando la situación, apoyándose también en la doble figura de Defelippo (15 puntos y 10 rebotes) en una noche en la que pudo salir de perdedor tras cuatro derrotas seguidas. Y en una noche en la que la defensa fue protagonista y rindió sus frutos.
Juan Pablo Casas
Pick&Roll
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