El partido no fue bueno, pero tuvo un dominador claro durante todo el partido, que fue el ganador. Otra vez, el equipo de Oscar Sánchez le gana a Gimnasia y lo dejó sin capacidad de reacción a través del trabajo de sus dos bases, Ibarra y Farabello que anoche entre ambos sumaron apenas 5 pérdidas y dominaron a Eloy Martín quien sigue sólo en la base ya que no está recuperado Leo Diebold.
El trabajo defensivo del visitante ahogó la iniciativa de los extranjeros de Gimnasia, anoche Chris Dade volvió a mostrarse totalmente fuera de los sistemas que propone Richotti y no estuvo solo ya que «Carlitos» Simpson jugó un partido aparte y si bien tuvo un par de aciertos (más allá de sus pobres 5 puntos), los enterró debajo de una gran cantidad de errores de coordinación.
Mientras se mantenían únicamente en Eloy Martín (8 pts 4 recuperos y 2 asistencias), Ken Leeks (22 puntos) y el propio Alejandro Ferrari (8 pts 3/7 en triples y 8 rebotes) que despertó en el último cuarto y en un momento clave, sin lograr extenderlo hasta el cierre, Gimnasia deambuló entre el ideal juego de equipo y la desidia de algunos a la hora de canalizar los buenos pasajes.
Quilmes no hizo mucho pero sí ganó en dos puntos claves: la concentración y la transición del juego ofensivo al defensivo. Ganó en los rebotes (36-29)—en los ofensivos robó— y sustentó su triunfo en la labor equipista (seis de los siete jugadores que entraron terminaron con más de 10 puntos).
Gimnasia y Esgrima 79: Martín 8 (x), Dade 14, Nóbile 15 (x), Simpson 5 y Leeks 22 (fi) Ferrari 11, Pedemonte 2, Bonzano 2 y Rodríguez 0. DT. Marcelo Richotti.
Quilmes 90: Ibarra 13, Farabello 18, Cavaco 12, Ebong 11 y Boozer 17 (fi) Arce 6 y Gil 13. DT. Oscar Sánchez.
Parciales: 21-27, 30-46 y 50-62
Árbitros: Daniel Rodrigo - Mario Aluz
Fuente “diario el patagónico”
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