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Voces de la última noche

Las voces de los perdedores fueron lideradas por el pivote Shaquille O´Neal, el escolta kobe Bryant y el técnico Phil Jackson.

Shaq no tiene excusas

El pívot estrella de Los Angeles Lakers, Shaquille O´Neal, no tuvo más remedio que aceptar que los Pistons de Detroit, los nuevos campeones, de la NBA, fueron mejor que su equipo.

“Los Pistons hicieron su trabajo y además al final pudieron dejarnos fuera en el quinto partido y quitarnos el título”, declaró O´Neal. “Lo tenemos excusas, al margen de la lesión de Karl Malone, el resto de los jugadores no hicimos bien las cosas”

O´Neal, que había criticado a su compañeros por no pasarle más veces el balón, dijo que el problema de las personales con que se cargó en la primera parte, le pitaron tres, limitaron su acción y eso lo sintió el equipo.

“No es el momento de las lamentaciones sino de aprender de cara al futuro”, comentó O´Neal, que anotó 20 puntos y capturó ocho rebotes.

Un futuro, que para los Lakers está lleno de interrogantes, y especialmente en cuanto a lo que puede ser la continuidad de sus dos grandes estrellas, O´Neal y Bryant.

“Tanto Kobe como yo, creo que el futuro lo estableceremos en base que es lo mejor para cada uno como profesionales”, señaló O´Neal. “Me gustaría seguir jugando con Kobe porque es un gran profesional, pero como es lógico cada uno buscaremos lo que sea mejor para nuestros intereses personales y familiares”.

Se intentó, pero no se pudo

El escolta Kobe Bryant, que había “garantizado” que Los Angeles Lakers iban a ganar el quinto partido de las Finales de la NBA, tuvo que admitir después de la derrota y humillación que sufrieron al perder 100-87 ante los Pistons de Detroit, que los Pistons fueron superiores.

“Desde el comienzo intente entrar en juego, lo mismo que el resto de los compañeros, pero el esfuerzo fue inútil porque los Pistons nos superaron en todos los aspectos”, declaró Bryant, que fue el máximo encestador de los Lakers con 24 puntos, pero volvió a fallar 14 de 21 tiros de campo.

“No es el momento de hablar de mi futuro, entre otras cosas porque todavía tengo contrato con los Lakers”, señaló Bryant.

“La garantía que había dado que íbamos a ganar el quinto partido tenía como base el que lucharíamos por conseguirlo, pero al final nunca pudimos entrar en acción y nuestro esfuerzo no fue suficiente”, agregó Bryant.

Jackson reconoce derrota

El entrenador de Los Angeles Lakers, Phil Jackson, por primera vez en su carrera profesional le tocó ser la imagen de la derrota en las Finales de la NBA y lo hizo al reconocer que los Pistons de Detroit se merecieron ser los nuevos campeones de liga.

“Hay que darle todo el crédito a los Pistons porque en el campo siempre hicieron las cosas correctas, jugaron un gran baloncesto y nunca nos dieron opción a reaccionar”, declaró Jackson, que buscaba su décimo título de liga como profesional. “Nunca nos dejaron entrar en acción ni establecer el ritmo del partido”.

Jackson no quiso entrar en detalles de lo que le había sucedido a su equipo, jugó sin el veterano alero Karl Malone, lesionado, pero si dijo que el escolta Kobe Bryant no pudo ser factor porque al final tampoco pudo desarrollar todo su potencial.

“A Kobe le pasó facturo todo lo que le ha tocado vivir durante la temporada y se quedó sin gasolina cuando más la necesitaba”, comentó Jackson, que no quiso tampoco valorar la perdida de la marca histórica.

Una marca que lo hubiese convertido en entrenador con más títulos en la historia de la NBA y del deporte profesional de Estados Unidos, pero que con la derrota queda cuestionado su legado.

“Honestamente creo que existe una mínima posibilidad de que vuelva la próxima temporada a los Lakers, pero será algo que discuta con los directivos del equipo”, declaró Jackson. “Mi mente en estos momentos no piensa en ese asunto”.

En tanto que en las voces de los ganadores sobresalieron el técnico Larry Brown y le mejor jugador de las finales Chauncey Billups.

“El triunfo de los Pistons es bueno para el baloncesto”

El entrenador de los Pistons de Detroit, Larry Brown, a sus 63 años, vivió la noche más emotiva de su carrera profesional al ver como su equipo se proclamaba nuevos campeones de la NBA después de vencer 100-87 a Los Angeles Lakers en el quinto partido de las Finales de la NBA.

“Es una noche muy extraña, pero me siento bien, aunque también tengo que reconocer que estoy todavía impresionado por lo que hemos logrado”, declaró Brown, que se convierte en el entrenador más veterano en conseguir un título de liga.

Brown reiteró que los Pistons no dieron ninguna sorpresa en las Finales sino que simplemente jugaron de la manera correcta y lo hicieron como equipo.

“Lo que hemos logrado esta noche es muy importante para el deporte del baloncesto dentro de la NBA porque se ha demostrado que trabajando y jugando en equipo también se pueden conseguir títulos”, subrayó Brown, que se convirtió en el primer entrenador en Estados Unidos que consigue el título de nacional universitario y el de la NBA.

“Es la mejor compensación que podía tener los jugadores porque no sólo hicieron un trabajo excepcional en el campo sino que dentro, en el vestuario se respetaron, se apoyaron y se quisieron mucho como compañeros”, destacó Brown.

Sobre el significado que podría tener el título de cara a su carrera profesional, Brown bromeo y dijo que todavía no era consciente que eran campeones.

“Siempre los amigos que habían ganado un título me dijeron que uno se enteraba cuando estabas un día en tu automóvil, conduciendo, y de repente comenzabas a sonreír porque te dabas cuenta que lo habías conseguido”, explicó Brown.

El entrenador de los Pistons dijo que ahora su misión y objetivo era trabajar para que la próxima temporada el equipo jugase todavía mejor baloncesto.

“Es nuestro gran reto como profesionales que conseguimos el título de campeones y tendremos que defenderlo”, valoró Brown. “Además tenemos que demostrar que nuestro triunfo no fue producto de la casualidad o de la suerte sino de un gran trabajo de equipo”.

El base Chauncey Billups ganó el premio de MVP de las Finales

El base Chauncey Billups, que logró un promedio de 20 puntos por partido, incluidos los 14 que tuvo en el quinto partido que ganaron los Pistons de Detroit por 100-87 a Los Angeles Lakers, fue nombrado el Jugador Más Valioso (MVP) de las Finales de la NBA.

Billups, al margen de ser el cerebro perfecto para los Pistons, que ganaron por 4-1 la serie al mejor de siete, también demostró que es uno de los mejores bases que hay en la NBA, sin que tenga la cotización de estrellas.

“Me siento muy feliz por el premio, pero sobre todo por el triunfo del equipo porque tenemos buenas individualidades, pero no estrellas y al final como es la filosofía de nuestro gran entrenador Larry Brown, el trabajo de conjunto es lo que vale y se impone”,declaró Billups.

“Desde el principio dije que íbamos a sorprender al mundo y lo hicimos con un gran juego”. El premio a Billups guardó el mismo paralelismo que cuando se lo dieron al base Joe Dumars, actual presidente de los Pistons, cuando con los Bad Boys ganaron las Finales de 1989-90 por 4-1 a los Trail Blazers de Portland.

“Es para mi un honor, que sin ser el favorito para conseguir el premio al final me lo dieron, pero creo que se lo merecen todos los compañeros por la manera tan brillante de jugar y darlo todo en el campo”, subrayó Billups.

Fuente: Espndeportes, EFE y NBA Español

COMENTARIOS (1)

Pocho 16/06/2004

Coincido con Brown que esto fue muy bueno para el basket. Porque gano el equipo que jugo como tal y tuvo mas intensidad, contra un conjunto de estrellas que parecian jugar solo cuando las circunstancias se lo exigian. Sinceramente, jamas hubiese creido que Detroit fuese capaz de ganarle una final a Los Lakers, y mucho menos por paliza. Detroit estuvo muy por encima de lo esperado en muchos aspectos (solo se hablaba de su defensa, pero fueron mucho mas que eso) y los Lakers muy por debajo de lo previsible. Es bueno que que no haya ganado un equipo donde dos jugadores fueron para ser campeones y eso parecia suficiente, aunque lo lamento por Karl Malone, un jugador cuya trayectoria merece un titulo. El MVP termina en manos de un jugador que nunca estuvo en un juego de las estrellas (desde que lo ganara con Detroit el arquitecto de este Detroit, Dumars), como podria haber sido para Ben Wallace o Hamilton. Y uqe haya ganado un equipo del este (hubiese apostado 100 a 1 en contra) revitaliza el interes por las finales, que desde hacia unos anios eran la final del oeste y punto. Habra que creer que el este tambien existe.

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