Virtus Bologna eliminó a Dinamo Sassari, el último campeón de la Supercopa de Italia, y se medirá en la final ante Olimpia Milano, que hizo lo suyo frente a Reyer Venezia. El domingo y en el pabellón de Bologna, ambos irán en búsqueda de su primer título de la temporada.
La jornada inició mal para el último argentino que quedaba en la pelea por el título: el Reyer Venezia de Bruno Cerella cayó 76-67 ante Olimpia Milano y se despidió del torneo. El oriundo de Bahía Blanca no pudo sumar en los cuatro minutos que estuvo en el parquet y su equipo no pudo repetir la actuación que había tenido en 2019, donde había logrado alcanzar la final.
Olimpia Milano fue intenso en el primer tiempo y construyó su victoria. Aprovechó una buena actuación de Malcom Delaney (8 puntos) en el primer cuarto y otra de Kyle Hines (8 puntos) en el segundo para irse al descanso largo con 20 tantos de ventaja en el marcador (43-23). Reyer Venezia la pasó mal desde el perímetro en los primeros veinte minutos: lanzó 0/10 y no acertó ni un triple.
De todas maneras, en el tercer cuarto la tortilla se dio vuelta: el conjunto de Ettore Messina fue el que sufrió con la puntería y Venezia mejoró tanto en ataque como en defensa. Olimpia Milano no pudo convertir triples y el equipo de Bruno Cerella solventó su ofensiva en Mitchell Watt que terminó la noche con 19 puntos. Sin embargo, no fue suficiente para el club del argentino.
En la otra semifinal, Virtus Bologna se impuso 76-88 y le quitó la chance de bicampeonato a Dinamo Sassari. El equipo de Aleksandar Djordjevic comenzó con el pie izquierdo y cayó en el primer cuarto 24-19, pero se repuso para quedar apenas 42-40 antes del final del primer tiempo.
La segunda parte del encuentro fue diferente y Bologna se quedó con ambos parciales con una buena actuación del serbio Stefan Markovic, que terminó el partido con 9 puntos, 4 rebotes y 5 asistencias. Y además, tuvo a cuatro jugadores que terminaron con doble dígitos: Milos Teodosic, Awudu Abass, Josh Adams y Amedeo Tessitori. Por su lado, en Dinamo se destacó el croata Miro Bilan, que se lució con un doble-doble con sus 24 puntos y 13 rebotes, a pesar de la derrota de su equipo.
Virtus Bologna vuelve a una final de la Supercopa de Italia luego de 10 años: la última que disputó fue una derrota 82-64 ante Mens Sana Siena en la edición de 2010. Y el club tiene sed de revancha con el torneo: si bien fue el primer campeón en 1995, luego perdió siete finales y no pudo volver a coronarse. Del otro lado tendrá a un Olimpia Milano que supo ser tricampeón (2016, 2017 y 2018) y quiere retornar al camino de la victoria.
Sebastián Weber
Pick&Roll
DEJA UN COMENTARIO