Tranquilo en el triunfo, prudente en la derrota y enfático al momento de transmitir ideas, Juan Ignacio Sánchez cuenta cómo vivió una temporada llena de nuevas experiencias para la organización y para el Dow Center.
Sin dudas el 2020 fue un año diferente para todos, pero que dejó fechas importantes para la organización. Weber Bahía Basket llegó a su 10° aniversario, se cumplieron 20 años del debut de Pepe Sánchez en la NBA, primer argentino en conseguirlo, la elección de Leandro Bolmaro en el Draft 2020, convirtiéndose en el segundo jugador del equipo drafteando en cinco años, contar con la presencia de Néstor “Che” García dentro de la organización, compartiendo toda su experiencia como su sabiduría y la incorporación de Laura Cors al staff de entrenadores, haciendo historia en el deporte.
“Han sido meses duros, de muchos replanteos, de cambios de estructuras pensando en el futuro, tanto para Weber Bahía Basket como para el Dow Center. Pero también de mucho crecimiento”, afirmó Pepe.
Su convicción respecto de la evolución del juego, el sistema de Weber Bahía Basket y los cambios de estructuras pensando en el futuro. Pepe, va cerrando el año en un mano a mano con el departamento de prensa de la organización.
¿Cómo viste el nivel de juego del equipo en general, luego de los cambios en la metodología y en el estilo propio?
Fue un gran año en general, hicimos un cambio drástico en nuestra metodología, estilo de juego y de estructura general. Estábamos viéndolo plasmado en el juego y en los resultados, allá por marzo. Se asumió un compromiso colectivo que al principio trajo muchas dudas, como es lógico, pero que, gracias a la confianza en el proceso de todas las partes, se logró plasmar en el juego, y en la mejora individual.
En ese sentido creo que fue un gran año para Weber Bahía Basket, ya consolidados en la vida diaria en el Dow Center, que era otro desafío grande.
Luego paso lo qué pasó, y lo hemos retomado de la manera que pudimos, sin poder incorporar jugadores con más experiencia, y al único que teníamos disponible, que era Jamaal, no lo terminamos sumando. Es un error mío y nada más que mío, se los dije a todos, incluido al mismo Jamaal.
Imagino que el resultado no cambia el análisis positivo de lo que fue este año para el equipo, el cual incluyó experiencias nuevas en la competencia.
Es difícil hacer un balance en medio de esta situación que estamos viviendo; se hace lo que se puede, todas las partes que involucran a la competencia. Desde la AdC hasta los jugadores y staff de equipos. Creo que el mérito pasa por estar presentes, estar compitiendo, tratar de mantener la historia viva de una Liga y por la unión de los equipos en pos de ese objetivo.
A nivel equipo, veo a nuestros chicos aprovechando la oportunidad de sumar una cantidad de minutos increíbles para su edad, haciéndolo muy bien en ataque y muy mal en defensa. Pero tiene lógica, por edad, talla y porque el foco nuestro estuvo siempre en la habilidad ofensiva, donde creo que los jugadores jóvenes tienen que hacer hincapié, porque es la parte más difícil de desarrollar del juego que se juega hoy.
La defensa es una asignatura pendiente, pero es responsabilidad mía que elijo el estilo de juego. Nuestro staff es tan novato en este nivel de competencia como los jugadores. Igual, tenemos todo el margen de mejora por delante. Dicho esto, insisto que es difícil medir el impacto de la enfermedad, todos nuestros chicos pasaron por el Covid-19, y el impacto físico y psicológico en varios de ellos es muy evidente.
Me quedo con el crecimiento individual de varios, siempre pensando en el objetivo de ser un semillero para la Selección Argentina, para que vean un futuro jugando en Europa o Estados Unidos. Y, también, con tener estos meses dentro de la organización a Néstor García, que tuvo que quedarse en Bahía por temas familiares, es una experiencia de aprendizaje increíble para el staff, los jugadores y para mí.
¿Cómo fue el impacto de la pandemia para el Dow Center y para el equipo profesional?
Fue fuerte, pasamos de ser un Centro de Alto Rendimiento, a ser una Unidad de Cuidados Mínimos Ambulatorios (UCMA) durante muchos meses. De más estar agradecer el esfuerzo de las empresas que nos apoyaron aún en esta situación, y hasta algunos esfuerzos personales también. Pero han sido meses duros, de muchos replanteos, de cambios de estructuras pensando en el futuro, tanto para Weber Bahía Basket como para el Dow Center. Pero también de mucho crecimiento; aprovechamos bien el tiempo, se trabajó muy a conciencia intentando entender los tiempos que vienen, los cambios que ya se manifiestan hoy, empezando por la disrupción tecnológica que estamos viviendo más fuerte que nunca.
Nos encuentra hoy mucho mejores en aspectos claves, con un grupo de trabajo bien flexible y adaptativo, tanto en la gestión como en la generación de contenido y la metodología que desarrollamos en estos meses y nos encuentra listos para los años por venir.
Lo que se trabajó durante este tiempo, sus certezas, el futuro…
Estamos haciendo mucho foco en la igualdad de oportunidades en el mundo del deporte (hay varios proyectos ya en marcha al respecto), en la data y la tecnología aplicada, y a su vez, en incorporar cada vez más sectores al Alto Rendimiento, al bienestar como forma de vida.
Sin dudas, la gran lección que nos deja este 2020 tiene que ver con entender que necesitamos poner énfasis en nuestros hábitos diarios.
PRENSA BAHÍA BASKET
socio encubierto 06/01/2021
igor .....
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