Una noche de básquet de alto impacto se vivió en el marco del quinto juego entre Nuggets y Blazers. Si bien Denver ganó un kilométrico juego en doble suplementario, la actuación de Damian Lillard se llevó todos los flashes y generó un sinfín de reacciones en redes sociales. El base anotador tuvo récord de triples en playoffs y todos bombazos muy significativos para esquivar cada bala y darle enormes dolores de cabeza a Malone (sobre todo).
Repasemos sus números. Lillard cerró con 5-7t2, 9-10t1 y 12-17t3 más 10 asistencias, 4 rebotes, 1 recupero y 3 tapas. Alucinante. Un líder total marcando su capacidad anotadora y sobre todo en los momentos donde Denver tenía el partido en sus manos. Récord personal de puntos en playoffs e historia pura considerando esos 12 bombazos (superando los 11 de Thompson).
Blazers la pasó muy mal en un momento del primer tiempo. Llegó a perder 59 - 39, llegó un parcial de 14-0 donde Lillard comenzó a motorizar a su equipo. Aplicó 18 pts incluido un triple y foul más otro bombazo desde el logo del ball Arena para prácticamente cerrar la primera mitad. Literalmente nadie pudo con él. Porter, Rivers y hasta Howard intentaron medirlo pero los recursos de Lillard fueron desconcertantes. De hecho colocó a Blazers arriba en el tercer cuarto y luego en el cierre del partido (108 - 107).
Llegaron los momentos de película. Una asistencia magnífica para el descuento de Mc Collum y Nuggets con la ventaja de 121 -118. Comenzaron los gritos por redes sociales para que Denver corte con foul. Llillard recibió la bola con 9.8s y ahí el destino estaba escrito.
Un aclarado en toda la cancha, side step como nos tiene acostumbrados y bombazo con 4.1s inclusive para ir al suplementario. Estallaron las redes y hasta el propio Manu sin poder creerlo. Cerró con 38 pts el tiempo regular.
La maratón continuó. Lillard totalmente en llamas, descontó con otro bombazo tras la escapada de Nuggets +9 y de nuevo lo hizo. Triples a velocidad, con el aro entre ceja y ceja sin importar la distancia o el ángulo. Conectó otro tras un movimiento fantástico de pies para alejar por medio segundo la defensa de River y dejar todo 134-132.
De nuevo la situación. Denver +3, la bola a Lillard, todos pidiendo la falta pero nada. Harrison lo contuvo mejor pero encestó un triple aún mas complejo. Giro con step back y la bola teledirigida para igualar. Asombroso. El final no fue igual. Si bien se despachó con su 12° para la ventaja de 140-138, sus compañeros malograron opciones, quedó demasiado solo casi sin lanzar y Denver llegó con un 9-0 crucial para ganar un partido monumental.
Noche de pura tensión y récord. Desde el gesto de Rivers al cielo agradeciendo por el yerro de Lillard en el final, hasta el ¡Cortá con foul Malone! Que se posicionó en redes a puro reclamo por todos sumado a los elogios de los propios NBA tras semejante actuación para Lillard. Demasiado solo pero nada le quita su capacidad para anotar triples increíbles. Los diferentes recursos para sacarse de encima al rival y con medio segundo anotar sea donde sea. Step back, side step, todo en un movimiento. Dame time.
José Fiebig
@Josefiebig
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