• 23-11-2024
  • Buenos Aires, 15°C

Llegó el día para Emanuel Ginóbili

Cuando allá por el mes de abril publicamos que Emanuel Ginóbili iba a ser incluido nada menos que en el Naismith Memorial Basketball Hall of Fame, el salón de la fama de la NBA, nuevamente el pecho se nos inflaba de tanto orgullo. Finalmente, llegó el momento.

El próximo sábado será el día en el que - una vez más - el bahiense quedará inmortalizado en la historia grande del básquetbol mundial cuando suba al escenario de Symphony Hall de la ciudad de Springfield, Massachusetts, a recibir la distinción con la presentación de Tim Duncan. La ceremonia comenzará a las 20 - hora argentina - y podrá verse a través de NBA TV y por DirecTv Sports.

“Fui parte de dos equipos increíbles. Si no hubiese sido por eso, no estaría acá”, declaraba Ginóbili una vez confirmada su nominación. “No se trata solamente de logros individuales; yo nunca gané un título de máximo anotador, un MVP y ni siquiera estuve en un All-NBA First Team. Si estoy aquí es por todos los que me rodearon: Los jugadores con los que jugué, los entrenadores que me dirigieron y los equipos en los que estuve. Sé que fui muy afortunado”.

Ginóbili es uno de los trece integrantes de la clase 2022 que ingresará al Salón de la Fama, de la que también forman parte los recordados Tim Hardaway, George Karl y Del Harris. La lista la completan Bob Huggins (entrenador), Hugh Evans (árbitro), Swin Cash (jugadora), Lindsay Whalen (jugadora), Marianne Stanley (entrenadora), Lou Hudson (jugador), Larry Costello (comité de Colaboradores), Theresa Shank-Grentz (jugadora) yRadivoj Korac (jugador).

En su intachable carrera deportiva, Emanuel Ginóbili brilló en cada una de sus diferentes facetas como jugador. Lo hizo vistiendo la camiseta de la Kinder Bologna, equipo con el que ganó dos ligas (2001 y 2002), dos Copas de Italia (2001 y 2002) y una Euroliga (2001), de cuya final fue MVP.

También fue un estandarte del seleccionado argentino, a quien condujo hasta el máximo logro en la historia del deporte argentino, como lo es la medalla de oro en Atenas 2004; logró el bronce en Beijing 2008, y el subcampeonato en Indianápolis 2002 más el oro en el FIBA Américas de Mar del Plata 2011, con el que Argentina consiguió el pasaje a Londres 2012.

Y, por supuesto, su gran marca en el básquetbol mundial la dejó con la camiseta de los San Antonio Spurs. Allí, Manu se destacó en un terreno donde, hasta ese momento, muy pocos extranjeros lo habían hecho. Él consiguió ser parte de un equipo que marcó la historia de la NBA, y de un trío (junto a Duncan y Tony Parker) que será recordado como uno de los mejores de la historia de este deporte.

Con los Spurs, Manu fue campeón en cuatro oportunidades: 2003, 2005 (finales en las que casi se queda con el premio al jugador más valioso), 2007 y 2014. Asimismo, obtuvo el premio al mejor sexto hombre en la temporada 2007/2008, mientras que también se dio el lujo de jugar dos partidos de estrellas: Denver 2005 y Los Ángeles 2011.

Seguramente los logros y las epopeyas alcanzadas por Emanuel Ginóbili dentro de una cancha de básquetbol se hayan visto y leído una y otra vez, pero nadie puede negar que no deja de sorprender (aunque muchos hayan caído en el acostumbramiento que derivó en la creencia de que era normal) y que, a medida que vayan pasando los años desde su retiro, van a ir agigantándose cada vez más. La eternidad lo aguarda a partir del sábado.

Sebastián Ciano
@Seba_Ciano
www.pickandroll.com.ar

COMENTARIOS (0)

DEJA UN COMENTARIO