Instituto va por su revancha en una instancia que le dio la espalda la campaña anterior. La gloria volvió a meterse en semifinales, reafirmó su favoritismo para estar en el Top 4 y con la intención de otra decir presente en una final como sucedió un par de temporadas atrás. Nuevamente tendrá la localía, viene de batallas muy complejas y buscará elevar su nivel y para seguir su paso en la 23-24. Veamos.
La gloria terminó en la segunda colocación de la etapa regular. Batalló a capa y espada prácticamente toda esa etapa para conseguirlo luego de estar por debajo de Olímpico y hasta peligrar el podio por momentos. Un elenco de oficio, experiencia, agregando jóvenes con potencial, mayor atletismo en su andar y variantes para no decaer cuando las cosas no vayan bien.
El elenco cordobés es otro de los conjuntos que fue parte de una doble competencia. Se coronó en la Liga Sudamericana dando a entender que podría ser uno de los elencos de poder dentro de la Liga Nacional, y terminó sucediendo. Un andar ciertamente regular, mucha versatilidad en su juego, sin un goleador (por momentos le pasó factura) pero con diferentes herramientas para castigar en base a su calidad de juego y jugadores dentro y fuera de la llave.
La vuelta de Copello fue importante. El base-escolta, clave en el campeonato de Instituto, le dio una mano grande a Vildoza desde la conducción además de tener otra opción en ofensiva con su clase y experiencia. El oficio de Cosolito en dichas instancias, el gran presente de Lugarini, los pasajes de calidad de Hoover más Pomoli como todo terreno e internos que suman en sus funciones.
Instituto no la pasó bien ante Regatas. Sufrió el primer juego dejando el control total a su rival, mostró todo su repertorio en el segundo juego, volvió a padecer problemas ofensivos y sin regularidad, aunque finalmente en el Juego 4 y 5 mostró su oficio, calidad ofensiva y supo mixear la intensidad de ambos costados para celebrar. Queda claro que necesitará un mejor nivel de juego y de productividad para que su final de torneo sea glorioso.
José Fiebig
@Josefiebig
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