GRANATE DE LUJO
El Granate llegaba con tres alegrías al hilo, mientras que el Aurinegro con cuatro triunfos en fila. En ese contexto, el elenco de Sebastián Saborido batalló con sus irregularidades y sustentó su victoria con un último cuarto sólido, y consistente, para celebrar 81-67, en un cotejo de la Conferencia Sur de La Liga Argentina.
Con este resultado, Lanús alimentó su récord a 9-1 para continuar en lo más alto de la Zona A, mientras que el equipo porteño quedó con una marca 8-3 para navegar por el segundo escalón de ese grupo.
La escuadra ganadora gozó de los recursos ofensivos del extranjero Matthew Dade con sus 22 puntos (9/13 de campo) y 3 asistencias, además de una labor integral fantástica de Martín Franchino con 14 unidades, 15 rebotes, 4 recuperos y el aporte de Joaquín Ríos con 19 tantos, 8 recobres y 4 asistencias. En el rincón de la visita sobresalió la labor de Juan Bellozas con 19 puntos y 10 rebotes.
La noche comenzó con un ritmo muy fluido sobre el parquet, con los dos equipos corriendo la cancha y anotando a granel (50% de campo para Lanús y 55% de dobles para El Talar) en sus avances para construir un trámite parejo, con una leve supremacía del local, que cerró en ganancia 24-21, con el combustible de Dade (11).
En el segundo capítulo, el Grana tomó las riendas con la energía de su segunda unidad, pero principalmente con todo el brío de Franchino (7), por eso se escapó 35-26, a los cuatro minutos. El visitante sufrió pérdidas (4) y los puntos de segunda chance del oponente, aunque pudo recuperar terreno al achicar 38-35. Desde ese punto, Lanús estampó un parcial 10-2 para retirarse al entretiempo arriba 46-37.
Tras las charlas en vestuarios, el Aurinegro saltó reverdecido, con un rendimiento superior, por lo cual impuso sus condiciones con la conducción de López Banegas y el desnivel de Bellozas en la pintura. Tal grado de reacción que el visitante revirtió el resultado 55-54, con 1:40 en el reloj. Empero, el dueño de casa pudo cerrar 58-57 en su periodo más magro e irregular.
En el último segmento, El Talar se hundió en una sequía, al unísono que Lanús halló en Dade la fórmula para producir soluciones individuales a un entramado colectivo empastado, por lo cual se adelantó 65-57. Franchino prosiguió intenso, bajando rebotes, brindando segundas oportunidades y también anotando, por eso se agigantó la brecha 73-60, a falta de 3:30 minutos. El equipo porteño no supo cómo corregir su anemia ofensiva y el Granate transitó con solidez a otra victoria más.
Informe y fotos: Prensa Lanús
LA UNIÓN EN EL FINAL
En el duelo de entrerrianos, el triunfo fue local en Colón por 75 a 74, y tuvo como figura a Caire con 18 puntos, 5 rebotes y 1 asistencia. En la visita hizo lo propio, Cavallin con 24 puntos, 6 rebotes y 2 asistencias.
El primer período fue netamente del local, jugó, defendió y convirtió para marcar la diferencia e imponer su juego desde el arranque. Rocamora buscó acercarse pero la efectividad no lo acompañó, finalizando parcialmente abajo por 27 a 13.
El segundo cuarto fue bastante más parejo para el cierre de goleo pero durísimo para La U. Rocamora empezó a pulir errores, cerrar espacios y se le abrió el aro. La Unión, apagado y desencontrado con el tanteador, sólo aprovechó la diferencia para irse al descanso arriba por 36 a 33.
A la vuelta del descanso, la disputa no fue fácil. Rocamora empezó a lucirse, mostró su mejor cara y puso en aprietos a La Union. Sin embargo, los de Guastavino supieron sostenerlo para llevárselo por 61 a 54. El final tuvo todo lo que un clásico debía tener, no apto para cardíacos ni fanáticos claro. Un partido digno de neutrales.
Los de Domínguez se pusieron firmes y llevaron al Rojo de la 12 a reforzar en todos los aspectos. A falta de 1 segundo con 8 milésimas, con el juego empatado en 74 el local recibió una falta que lo llevó a la línea a Acuña. Metió el primero, y el segundo rebotó para caer en manos de Emilio Giménez que la cuidó para que el tiempo se consuma y festejar un importante triunfo por la mínima, 75 a 74.
Informe y fotos: Prensa La Unión de Colón
DEJA UN COMENTARIO