Diferentes sensaciones se encontraron al finalizar el partido. Los seguidores de los Pistons estaban tristes por la derrota de su equipo, ante Phoenix, por 70-64, en la Liga de Verano de Las Vegas. Pero entre las caras largas de la derrota, había un argentino que se retiró conforme: Carlos Delfino.
El escolta volvió a jugar tras una larga inactividad. Las lesiones (doble operación en la rodilla) y su salida del roster días previos al debut en los playoffs no le posibilitaron culminar su primera temporada en la NBA de la mejor forma.
Delfino, pese a la caída de los Pistons, cumplió. No sintió molestias en la zona de la rodilla ni tampoco en el hombro izquierdo (el miércoles sufrió un duro golpe en una práctica que no le permitió llegar en óptimas condiciones al encuentro).
En 30 minutos de juego (2 menos que Junior Harrington, el Pistons que más tiempo estuvo en campo), como titular, aportó 6 unidades (3/7 en dobles, 0/1 en triples y 0/1 en tiros libres), bajó 5 rebotes (2 ofensivos) para culminar como el mejor rebotero del equipo junto a Darko Milicic, dio 3 asistencias (mejor pasador de Detroit), 2 recuperos (los Pistons apenas robaron 4 balones en todo el encuentro), un bloqueo, tuvo 4 pérdidas de las 22 del total del equipo y cometió 5 faltas personales. Se puede decir que Delfino tuvo minutos y que cumplió en casi todos los rubros.
El goleador del encuentro fue Leandro Barbosa que sumó 19 para los Suns. En Detroit sobresalieron los debutantes Alex Acker y Jason Maxiell que culminaron con 16 puntos respectivamente.
El juego fue intenso y se sacaron escasas diferencias. Phoenix lo tenía ganado, pero Harrington conectó un triple y dejó a los Pistons abajo por uno (64-65) con 34 segundos por jugar. Barbosa anotó dos libres y estiró la ventaja a falta de 13 segundos. Acker no pudo igualar con un triple y los Suns cerraron la historia con otros tres libres de Barbosa.
Detroit volverá a jugar esta noche ante los Denver Nuggets.
Juan Manuel Rodríguez
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