La estadía de Jarrett Stephens no duró mucho. Se podría decir que como llegó se fue, algo así como que entró por una puerta y salió por la otra, y ahora el cuerpo técnico xeneize busca un reemplazo para la zona pintada.
Fue tan corta su estadía en Boca Juniors que Stephens no alcanzó a pisar el suelo del estadio Luis Conde. La comprimida y cargada agenda del elenco que orienta Gabriel Piccato hizo que el pivot debutara en el Torneo Súper 8 Clarín y luego se trasladara a Belo Horizonte, Brasil, para disputar uno de los cuadrangulares de la Liga de las Américas.
Por el Súper 8, Stephens aportó 12 puntos, 58.3% en dobles (7/12), 33% en triples (2/6), 100% en libres (4/4), 4 rebotes y 1.5 asistencias en 2 partidos; mientras que por Liga de las Américas promedió 11 unidades, 54.5% en dobles (12/22), 22% en triples (2/9), 60% en libres (3/5), 6.3 rebotes y 1 pase gol en 3 encuentros.
Ya desde el día de su debut, ante Obras Sanitarias por el Súper 8, quedó en evidencia que Stephens no era un jugador para Boca. El extranjero, de escasa estatura para dar lucha en la pintura, no llegó en un buen estado físico y tampoco se mostró recuperado de una lesión en la rodilla izquierda.
El próximo paso de Boca, que se quedó con las manos vacías en la Copa Argentina, Campeonato Sudamericano de Clubes, Súper 8 y Liga de las Américas, será fichar un pivot de buen porte para dar pelea en la zona pintada.
Por lo pronto, este Boca modelo 2007/08, extraña y mucho las presencias de Lázaro Borrell (en Obras) y Martín Leiva (Ford Burgos de la Liga LEB de España).
Foto: Majo Gil (mjgil@pickandroll.com.ar)
Juan Manuel Rodríguez
www.pickandroll.com.ar
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