Así se disfruta más

• Pablo Tosal (ptosal@pickandroll.com.ar)
• 14/04/2009
• (70 comentarios )

No es un juego ciencia, por eso no guarda lógica. Peñarol y Boca están por fuera de las previsiones. Es una serie altamente emocional que no tiene un eje, un denominador común. Se está llevando con lo que se puede por parte de ambos equipos. Boca tenía la serie más de su lado, ahora Peñarol la puso parda en el desarrollo y a su favor en el tanteador. Anoche no jugaron un gran partido pero se cumplió con la primera consigna de los play off: ganar como lo único que importa. El partido fue chato y con la lógica previsión de que ambos equipos trabajaron en la semana como destruir el juego del rival.

Hubo un 50% de acierto defensivo (de parte de ambos) y un 50% de errores ofensivos. Se caería en la tentación de ponderar a las defensas. En realidad, luego de los dos juegos en Mar del Plata hubo algo mucho más lógico en el partido 3 de la serie: las ofensivas tomaron porcentajes más racionales, más parecido a sus promedios naturales de la liga. Esto le quito 20 puntos por equipo.

De todos modos el partido siempre estuvo más del lado de lo que Peñarol propuso que de lo que Boca podía hacer. Hay para los partidos de Play off siempre guardado una sorpresa, en esta serie el banco de suplente de Peñarol está llamado a ser el guardián de Peñarol. Factor clave de la serie.

El partido empezó de cabeza para Peñarol, porque en menos de un minuto Román González sumó do faltas personales. Allí Alston con toda lógica comenzó a postearse y jugar cerca del aro el duelo personal, obligándolo al técnico de Peñarol a cambiarlo por Reinick.

Luego de un comienzo a todo gol (6-8) con todos los puntos de la visita en manos de Tato Rodríguez, el partido tuvo 4 minutos de pérdidas, errores y sin gol. Carl Edwards no encontraba el aro lo mismo que Byron Johnson, que lucia activo pero sin gol. Con dos corridas de Boca, el gol de Gaby Fernández (7) y un triple de Aguirre el local sacó 5 (18-13), y ésta sería la única diferencia a favor que tuvo Boca en todo el partido. Pero un triple de Vega y otro de Diez coronaron un parcial 7-0 de Peñarol para que se lleve el primer cuarto 18-19.

Las defensas ajustaban hombre a hombre y Peñarol tuvo mejor contención del uso del pick and roll de Boca que tanto lo lastimó en Mar del Plata. Además cada vez que Espil o Aguirre pusieron la bola del lado opuesto, no hubo un tiro de tres puntos certero que abriera la defensa milrayitas.

En el segundo cuarto siguió dominando Peñarol en el juego a pesar que Lucas Picarelli no ingresó bien, un tanto desprolijo perdió balones que Boca no supo capitalizar más que en la igualdad de 21. Pero cuando un equipo juega mejor lo demuestra por consecuencia lógica en el tanteador y mientras la visita llegaba por diferentes vías Boca sobrevivía gracias a un triple de Espil (aparecieron sus primeros puntos) y otro de Calvi.

El front court de Peñarol por entonces con Diez y Reinick era de lo más sólido, con un absoluto dominio de su tablero y con Hernández probando formaciones bajas con Muruaga de tres. “Pepe” tuvo un gran ingreso colocando dos triples para darle un aire a Peñarol (29-36).

El partido no era bueno. Todo lo que no podían hacer las defensas lo erraban sin oposición algunos jugadores en una mala noche ofensiva. David Jackson dijo presente con 7 puntos casi en fila y Peñarol sacó una luz interesante al final del primer tiempo (37-45).

El tercer cuarto arrancó con un Peñarol encendido de la mano de Byron Johnson (10 pts en el parcial), que se hizo un pic-nic ante la lentitud defensiva de los internos de Boca. Byron sacó diferencias de velocidad en la ejecución. Una antideportiva a Espil completó un panorama negro para el xeneize que corría abajo por 16 puntos (37-53, máxima del partido).

Decidido a pelear Espil se cargó el equipo al hombro y mostró el camino, más con actitud (y puntería) que con juego asociado. Dos triples del escopetero bahiense (uno de ellos de más de 7 mts) más otro triple de Gaby Fernández redujeron distancias (46-57).

Estaba visto que Peñarol había trabajado mucho sobre las cortinas y la salida de los tiradores de Boca porque cuando se encendió Espil, ajustaron sobre él y lo frenaron dejándolo sin espacios. Hernández apostó un rato por la doble base confiando nuevamente en el juvenil Campazzo que otra vez cumplió una buena tarea.

El tercer cuarto se fue con dominio de Peñarol, de las tablas, con su defensa y con más gol. Y dos datos insoslayables, el MVP nacional afuera: Román González, miró casi todo el partido desde el banco y el MVP de la liga, Jackson, muy errático: cerró el tercer cuarto con 1/8 en triples.

El sustento para ganar de modo decisivo llegó para Peñarol en las manos de Alejandro Diez que jugó un partido completo. En ataque convirtió 10 (dos triples) de sus 15 puntos en el último cuarto y en defensa fue un león atajando todo. Justamente un triple del olavarriense le dio a Peñarol 14 de diferencia en el segmento final (59-73). Nada hacía prever que Boca reaccionara. Estaba sin juego asociado y sin gol en lo individual.

Pero se encendió Espil (eterno) y aunque llegó la quinta falta de Aguirre Boca se puso a 6 (66-73) con mucho por jugar (más de 4 minutos). Otro triple de Ale Diez le dio aire a la visita (67-76) a falta de 3 minutos, pero las secuencias de cierre del partido fueron todas acciones favorables a Boca.

A falta de 22 segundos con dos libres de Vega convertidos Peñarol sacó 5 de ventaja (77-82) pero llegó un triple de Edwards con falta incluida del propio Vega, que redujo a solo un punto el cierre (81-82) a falta de 10 segundos. Boca cortó con falta a Picarelli y el base se redimió en la línea con dos libres vitales (81-84). Luego contuvo el rebote del siguiente triple errado de Espil. Con nada por jugar, Jackson fue detenido con falta y ya era fiesta milrayitas.

Pero al partido le quedaba una más. David en una mala noche, erró los dos libres y en la búsqueda del rebote le bajaron falta ofensiva a Román González. Allí Gaby Fernández metió el primero (82-84) y erró el segundo. Alejandro Diez entonces decoró el resultado con dos libres para demostrar una vez más que Peñarol no perdió en toda la liga dos partidos seguidos.

Síntesis
Boca (82): Nicolás Aguirre 12 (x), Juan Espil 23, Carl Edwards 12, Gabriel Fernández 15 (x) y Derrick Alston 13 (FI); Leandro Masieri 2, Fernando Calvi 5, Juan Pablo Sánchez 0 y Raimundo Legaria 0. DT: Fernando Duró.

Peñarol (86): Sebastián Rodríguez 12, David Jackson 19, Sebastián Vega 11 (x), Byron Johnson 14 y Román González 0 (FI); Alejandro Reinick 4, Lucas Picarelli 4, José Muruaga 6, Alejandro Diez 15 y Facundo Campazzo 1. DT: Sergio Hernández.

Parciales: 18-19, 37-45 y 54-67
Árbitros: Roberto Smith-Silvio Guzmán.
Estadio Luis Conde - Boca.
Serie: Peñarol 2-1

Fotos: Marcelo Demián Schleider - www.infoliga.com.ar

Pablo Tosal
www.pickandroll.com.ar