La NBA ofrece un calendario durísimo de 82 partidos, plagado de viajes, hoteles, lugares y gente entre los que los jugadores – hiperprofesionales, es verdad – deben trascurrir su vida hasta que finaliza el año. En este contexto, a veces es difícil salir de una racha negativa; Ayer los Houston Rockets le escaparon a un de 7 derrotas consecutivas luego de vencer a los Charlotte Bobcats 100 a 94.
Pese a tener enfrente a uno de los peores equipo de la temporada (Charlotte va ante penúltimo en el Este con récord de 10-31), al equipo de Carlos Delfino le costó bastante obtener el triunfo, algo que no hacía desde el 8 de enero. El Lancha tuvo un buen aporte desde el banco con 16 puntos (3/6 en dobles, 3/8 en triples y ½ en libres), 3 rebotes y 1 asistencia en 25 minutos.
El banco de los Rockets en general completó una buena jornada con 47 puntos. Marcus Morris fue autor de 21 tantos (8 rebotes y 2 tapas), al tiempo que el base Patrick Beverly sumó otros 10. No obstante, James Harden volvió a ser el más destacado del equipo texano con 29 tantos, aunque lanzó 5/20 en tiros de campo, pero atacó mucho el aro y terminó con 19/21 desde la línea. Chandler Parsons terminó con 14, 7 tableros y 5 asistencias.
A los Bobcats no le alcanzó la mejor noche en la carrera de Kemba Walker, quien terminó con su récord personal de puntos (35). Pero su equipo no lo ayudó: Charlotte terminó con un 42% en tiros de campo; Ramon Sessions cerró su planilla con 19 tantos, 8 rebotes y 5 asistencias, al tiempo que Hakim Warrick anotó otro 10.
Los Houston Rockets ahora volvieron a meterse en puestos de playoff, marchan octavos en la conferencia este con un registro de 22 victorias y 21 derrotas. Mañana jugarán un partido importante ante un rival que está en un buen momento y que tienen a solo tres juego: Los Denver Nuggets.
Que termine enero
El mes de enero no ha sido no mejor que le pesó a los Knciks en esta temporada en la cual van por todo. Desde el comienzo de 2013, el equipo de Pablo Prigioni solo pudo ganar cuatro partidos – perdió 5 – y no logra encontrar regularidad.
Ayer cayeron en el clásico ante los Brooklyn Nets por 88 a 85, aunque todavía se mantienen segundos en la conferencia Este, a un juego y medio de los Miami Heat. Prigioni estuvo durante 9 minutos en cancha y solo pudo aportar 1 rebote (no tiró al aro), y perdió un balón.
Joe Johnson fue el factor clave de los Nets, quienes desde el comienzo del interinato de P.J Carlesimo – tras la salida de Avery Johnson – volvieron a sonreír y solo perdieron uno de sus últimos 10 partidos. El ex Atlanta fue el máximo anotador de los Nets con 25 puntos, al tiempo que anotó el doble de la victoria a falta de 22 segundos, cuando el marcador estaba 84-83 a favor de los Knicks.
Deron Williams estuvo errático (3/10) pero cerró su planilla con 14 puntos y 12 asistencias, mientras que el pivot Brook Lopez fue autor de 14 tanos y 11 rebotes. Brooklyn sumó su segunda victoria en fila y se mantiene cuarto en el Este con récord de 25-16.
En New York no alcanzaron los 29 puntos de Carmelo Anthony, tampoco los 16 de J.R Smith ni los 15 de Amare Stoudemire, quien jugó 27 minutos, su mayor cantidad de minutos desde que estuvo 28 minutos ante los Boston Celtics el pasado 7 del corriente.
Los Knicks ahora descansarán hasta el jueves, cuando comiencen una mini gira de dos partidos fuera del Madison Square Garden ante dos rivales divisionales: El jueves frente a Boston, y el sábado en Philadelphia.
Sebastián Ciano
Twitter: @Seba_Ciano
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