Tuvieron que pasar seis años para verlos de nuevo en la gran final. Luego de algunas frustraciones y de quedar cerca en varias otras oportunidades, los San Antonio Spurs nuevamente se encuentran ante la chance de un nuevo título, el quinto de su historia. Esta noche (22hs, ESPN), comenzarán a disputar las finales ante el Heat de LeBron James para intentar agrandar aún más su rica historia.
La ruta hasta estas finales ha sido satisfactoria para los de Gregg Popovich. Arrasaron con los Lakers 4-0 en primera ronda, luego impusieron su jerarquía en los momentos más complicados frente a los Golden State Warriors (4-2) y, aunque con partidos luchados, sorprendieron a todos al barrer a Memphis en las finales de conferencia.
Los Spurs llegan muy bien, sanos – un dato para nada menor – y con dos de sus máximas estrellas en su mejor nivel; Tim Duncan y Tony Parker dan qué hablar al mundo con su lenguaje basquetbolístico.
Duncan continúa llenando los ojos de todos. A sus 37 años de edad, y en su decimosexto año en la NBA, sigue siendo pieza clave en San Antonio; Nadie imagina a los Spurs levantando el Larry O’Brien luego de una serie floja por parte del ex Wake Forest. En esta postemporada estuvo impecable con una media de 17.8 puntos (46.1% TdC), 9.2 rebotes, 2.1 asistencias y 1.7 tapas en 34.4 minutos de acción, como así también apareciendo en los momentos más calientes de los partidos, como en los suplementarios ante los Grizzlies o los Warriors.
Parker está en el mejor momento de su carrera. El francés es el goleador del equipo con 23 puntos (47.5%) en 37 minutos de acción; Con sus rompimientos de la primera línea hace estragos porque anota o crea espacios para que lo hagan sus compañeros (7.2 asistencias por noche). Es la carta más importante de San Antonio dentro de un funcionamiento de equipo.
Emanuel Ginóbili es el equilibrio. Quizás no se destaque en nada en particular, pero no deja de hacer todo en la cancha para os Spurs. Llega a las finales con un promedio de 11.5 tantos, 4.5 rebotes y 5.4 asistencias en 25 minutos de juego, y tampoco sufrió ningún tipo de lesión en la postemporada. Buscará el cuarto título en 11 años de carrera.
¿Qué hay del otro lado? Pues del otro lado está nada menos que el campeón defensor, el equipo a vencer durante todo el año y, el dato principal, está LeBron James. La serie parece girar alrededor del cuatro veces MVP de la NBA al que , se sabe, defender es casi una misión imposible.
En un principio Kawhi Leonard sería el encargado de marcarlo en el uno contra uno ¿Será dejar que james haga lo que quiera es impedir que el resto juegue una estrategia válida? El nacido en Akron es quizás el jugador – y el atleta - más completo del planeta, por lo que dentro de la cancha muestras varias facetas del juego que cumple a la perfección; Hasta jugó posteado y le causó muchos dolores de cabeza a Indiana.
Miami es uno de los mejores equipos tripleros de toda la NBA. Durante la temporada regular promedio un 39.6 % en ese rubro, y estuvo solo por debajo de los Warriors, lo mismo que ocurre si la estadística se limita a los playoff (35.6%). Teniendo en cuenta este dato, las piernas deberán estar filosas por el lado de San Antonio a la hora de ayudar ante las penetraciones de LeBron y una eventual descarga alguien que espera abierto.
Aunque quizás la mejor cara que mostraron los de Spoelstra fue su contracción defensiva. Es el segundo mejor equipo de los playoff con un promedio en contra de solo 87.6 puntos por noche, al tiempo que deja a sus rivales en un 42.9 % de cancha. El manejo del balón por parte de los Spurs será vita, tratar de reducir al mínimo las pérdidas. La presión del Heat en la primera línea es muy importante y le da puntos fáciles al otro lado, porque cuenta con jugadores que no suelen fallar.
Miami viene de una serie durísima frente a los Pacers, en la que padeció el aceitado juego en equipo de los de Frank Vogel y le costó mucho el aspecto ofensivo. Quizás ése sea un punto a mejorar, porque será muy difícil que mantengan a los Spurs por debajo de los 80 puntos, incluso con una buena tarea defensiva. San Antonio es un equipo que anota por naturaleza (101.6 ppp).
En los papeles es una gran final, y sin lugar a dudas lo será. Porque hay estrellas que pasarán a la historia, porque los entrenadores son de primerísimo nivel, porque los equipos son los dos mejores de la temporada, y porque hay un argentino, Emanuel Ginóbili. Todos con él.
Sebastián Ciano
Twitter: @Seba_Ciano
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