-Fue un partido donde el primer cuarto se perdió 27-11, y a partir de ahí fue todo cuesta arriba. ¿Por qué sucedió esto?
-Creo que ellos entraron al partido con mucha energía y gran acierto en sus ataques. Cuando se abrió el partido de manera tan temprana no tuvimos la paciencia para revertir el resultado poco a poco. Atenas manejó nuestra ansiedad y el marcador de manera correcta.
-¿En algún momento creíste que se podía revertir el partido?
-Siempre hay lugar para el optimismo, pero cuando la ventaja se acercó a los treinta puntos en el tercer cuarto era muy difícil mantenerlo. Atenas tiene jugadores muy experimentados que manejaron muy bien el partido.
-¿Les dijo algo Julio Lamas al finalizar el juego en el vestuario?
-Julio no habló mucho. Es muy difícil hacer un análisis de un partido así. Seguramente en el entrenamiento de esta noche hablaremos un poco de lo que pasó en el partido y, obviamente, del juego de mañana contra Libertad.
-¿Cómo se cambia el chip a menos de 48 horas para encarar el próximo compromiso?
-Mucho tiempo no hay para trabajar una derrota de ese calibre, así que las correcciones deben ser puntuales y acertadas. Lo más importante, de todas maneras, es recuperarnos anímicamente y afrontar el partido con mayor energía y actividad.
-¿Qué puntos importantes hay que tener en cuenta para quedarse con la victoria frente a Libertad?
-Es un equipo que tiene mucha velocidad y que plantea muy bien todos los partidos a partir de un entrenador minucioso como Gabriel Picatto. Su localía no es un dato menor. Mañana tenemos otra dura parada.
Fuente: Prensa Obras
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