Ante 19.596 espectadores Golden State Warrios se quedó con el segundo punto de la serie, tras vencer a New Orleans por 97 a 87 en un partido que debió luchar deportiva y mentalmente para poder ganarlo.
El partido empezó con un New Orleans muy agresivo en ataque, que aprovechó con su quinteto titular la falta de efectividad de Golden State. La soledad de Curry en el tanteador, hizo que los Pelicans se agrandarán y con un Anthony Davis explosivo se queden con el primer cuarto por 28 a 17.
En el segundo cuarto, el entrenador de los locales Steve Kerr envió a la cancha un equipo suplente, que con Barbosa a la cabeza revirtió en solo tres minutos la situación del mal comienzo. Esa revolución lograda por la banca amarilla, contagió al resto del equipo que con la vuelta al rectángulo de juego empezó a lastimar a una defensa visitante que ya no era la misma, tanto es así que con dos triples consecutivos de Klay Thompson que solo tenía anotado dos puntos, Golden State llegó al empate en 47 a falta de 2 minutos para el final.
El primer tiempo inesperadamente por el trámite del encuentro, terminó siendo para los locales que se fueron ganando por tres puntos (55 – 52) con un triple de Stephen Curry y un parcial de 38 a 24 final.
El tercer periodo no fue de los más vistosos que esta serie nos pueda regalar, mucha lucha y poco juego. Las imprecisiones y la mala toma de decisiones ocuparon el papel principal en 12 minutos, donde los dos conjuntos se equivocaron constantemente y es por eso que la paridad en resultado dejó una incógnita para el final del encuentro. Gordon y Evans se sumaron en el rubro anotador de la visita, mientras que Curry fue la clave para mantener en juego a los locales. Con 19 puntos anotados y 16 recibidos, los Pelicans alcanzaron en 71 a los Warriors para entrar en tablas al último cuarto.
Decidido a llevarse a New Orleans por delante, Golden salió a defender muy intenso su aro y aprovechó cada contraataque para un lograr veloz un parcial de 8 – 2 que le dio un poco de aire en el tanteador (79 – 73), esta situación obligó a Monty Williams a solicitar minuto. En el regreso, de la mano de Gordon, la historia volvió a cambiar de dueño y el parcial fue favorable para los Pelicans por 10 – 4, para que el partido a cinco del final volviera a estar parejo (83 – 82).
El quiebre llegó finalmente para los Warriors que encontraron en Thompson la llave del triunfo con lanzamientos anotados desde tercera dimensión, media distancia y hasta con penetraciones. Esto fue bien acompañado por la feroz potencia de Draymond Green en los tableros y su capacidad para anotar cada vez que se lo necesite.
Distinta fue la suerte para la visita que justo en el final del partido se encontró con una sequía en ataque que fue fatal, ya que solamente sumó seis puntos en los momentos más cruciales y en un abrir y cerrar de ojos se vio muy lejos en el tanteador. Es por eso que el triunfo quedó nuevamente en manos de los de amarillo por 97 a 87 que se imponen en la serie por 2 a 0.
El goleador del partido fue Klay Thompson con 26, seguido por Stephen Curry con 22 y 14 de Draymond Green. Mientras que por el lado de New Orleans, no alcanzaron los 26 de Anthony Davis y tampoco los 23 de Erick Gordon.
Flavio Ariel Ibarra
En Twitter @Flaviorocambole
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