La NBA ya había repartido los premios al mejor sexto hombre (Louis Williams), entrenador (Mike Budenholzer) y defensor (Kawhi Leonard) de la temporada 2014/2015, y ahora le llegó el turno al rookie; Andrew Wiggins, de los Minnesota Timberwolves fue el más votado.
Es la primera vez en la historia de la franquicia de Minneapolis que un jugador de su plantel recibe la distinción al debutante del año. El canadiense, de 19 años, llegó a la NBA de la mano de los Cleveland Cavaliers, quienes lo seleccionaron en la primera posición del último draft.
Sin embargo, cuando se produjo el regreso de LeBron James comenzaron las negociaciones para contratar otra estrella para que juegue a su lado; el Rey vio con buenos ojos la llegada de Kevin Love, quien a su vez pedía un cambio de aire yla posibilidad de luchar por un título, algo que no veía posible en Minnesota.
En este contexto fue que Wiggins, junto al número uno del draft de 2013, Anthony Bennet, estuvo involucrado en la transacción y mudó sus pertenencia al frío de Minnesota. Al menos individualmente, no le fue nada mal.
El base jugó los 82 partidos de la fase regular - Minnesota no llegó a los playoff - y tuvo un promedio de 16.9 puntos (43.7% de cancha, 31% en triples), 4.6 rebotes, 2.1 asistencias y 1 recupero en 36.2 minutos.
“Debe darle mucha esperanza para el futro de los Minnesota Timberwolves. La gente debe comenzar a mirar las cosas de otra manera. Es el despegue; tenemos mucho talento joven”, opinó Wiggins, quien terminó como el máximo anotador entre los novatos.
Wiggins obtuvo 110 de los 130 votos posibles de primer lugar para un total de 604. Segundo en la consideración quedó el montenegrino Nikola Mirotic, de los Chicago Bulls, y tercero el pivot de los Philadelphia 76ers, Nerlens Noel.
Sebastián Ciano
Twitter: @Seba_Ciano
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