A poco más de un mes para que la tercera edición de la Liga Femenina organizada por la Asociación de Clubes comience a rodar, ya se van ajustando los últimos detalles.
De movida, y a esta altura del calendario, hay cinco equipos confirmados; Quimsa, Rocamora, Obras, Berazategui y Vélez; aunque la luz de esperanza de sumar un sexto aún no se apaga.
Las chances, con menor o mayor probabilidad, estarían en el hecho que Unión Florida o Las Heras puedan revertir su actual “no” (por problemas económicos), y se alisten. Otra alternativa es que de el paso adelante un debutante, que habría mostrado cierto interés en las últimas horas.
Con respecto a la conformación de plantillas, sería un hecho que las mismas estarían integradas por 8 jugadoras mayores. En esta categoría ingresan todas las nacidas desde 1998 hacia atrás.
Otro aspecto interesante es que se seguirán tomando como nacionales a todas las jugadoras latinoamericanas.
Como en el 2018, la liga estará compuesta de dos torneos. El primero iniciaría el 9 de marzo, y en el mismo, estaría la chance opcional de contar con una extranjera. Ya para el segundo, que arrancaría a mediados de mayo la ecuación cambia.
Allí habría una obligatoriedad de al menos una extranjera o franquicia, y un máximo de 4 entre ambas; con el tope de dos franquicias por equipo. En esa grupo estarán ubicadas las 12 Gigantes que disputaron el Mundial en Canarias.
Lo que no estaría definido por el momento sería la realización o no del draft; y en gran parte dependería del interés genuino de los clubes por tomar de allí extranjeras.
Por el contrario, lo que tiene confirmación es la disputa de la Liga de Desarrollo. Como sucederá con la LFB, al tener menos equipos, pero mantener la duración del calendario; los elencos tendrán mayor espacio entre partidos, dándole así un mejor descanso a las jugadoras y mayor tiempo de entrenamiento.
Emanuel Niel
@ManuNiel
www.pickandroll.com.ar
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