Trae Young venía con un comienzo de temporada arrollador. Sin temor, atacó y dañó más de una vez en sus primeros tres juegos, en los cuales Atlanta tenía récord 2-1. Pero una jugada prácticamente inocente le jugó en contra: en su intento por penetrar a la pintura, pisó al alero Justise Winslow y se torció el tobillo derecho.
Todas las miradas fueron hacia el base de 21 años, quien quedó sentado en el suelo y con muestras visibles de dolor. Luego se retiró de la cancha directo a los vestuarios y no volvió a entrar. Fueron apenas 11 minutos en cancha.
Terminado el juego, se especuló una lesión seria que lo detendría por toda la temporada. Sin embargo, el parte médico emitido por el personal de Atlanta Hawks arrojó que no se trata más que un esguince en el tobillo. De esta manera, el entrenador Lloyd Pierce respira tranquilo.
El tiempo de recuperación del jugador del Draft 2018 será estipuladamente de una a dos semanas. Puede volver en el cierre de la próxima o retornar en el inicio de la cuarta semana de acción de la NBA.
Juan Ignacio Alburquerque
@JuaniA10
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