La llegada de un nuevo argentino a la NBA siempre renueva las ilusiones dentro del mundo del básquet en Argentina. La historia cuenta con Emanuel Ginóbili como máxima figura en su rica historia en la liga. También se añaden los casos recientes de Luis Scola, Pablo Prigioni, Carlos Delfino, Walter Hermann y Andrés Nocioni en el último tiempo.
Luego del retiro de Manu, la bandera nacional pasó un tiempo sin representación y las especulaciones crecían hacia un nuevo candidato. Fue el base Facundo Campazzo, desde Real Madrid, quien dio el paso adelante y se animó a ser parte de la competencia más innovadora y llena de talento en el mundo del básquet.
Luego de confirmarse su llegada y pasada la pretemporada con algunos encuentros donde sobresalió su tarea en defensa y en ataque, llegó la hora de la verdad. En ese sentido, hacemos un recorrido de sus encuentros en Denver Nuggets.
Hasta el momento, la trayectoria en la temporada 2020-2021 de Facu puede ser dividida en dos etapas: una, que podría ser definida como la etapa de adaptación y aprendizaje; y otra como el proceso de consolidación dentro del roster.
La primera etapa puede ser ubicada durante los primeros 23 juegos, donde el base con pasado en Peñarol de Mar del Plata tuvo que ganarse la confianza del entrenador y de sus compañeros para tener más minutos en cancha. Más de una vez lo vimos afuera y sin jugar al argentino o, en otros casos, encuentro que no superaba los 15 minutos. Pese a tener un pequeño paso ante Minnesota Timberwolves en un back-to back con 15 y 11 puntos, respectivamente, el argentino no gozó de muchas oportunidades. Y, en esa sintonía, sus aportes no fueron tan significantes más allá de dar la cuota defensiva en algunos momentos y de dar a conocer una sorpresiva cualidad desde el triple.
Sus promedios no fueron tan sorpresivos en esos primeros dos meses y apenas cerró con 2 puntos y 1.3 asistencias en diciembre y 4.3 tantos (43% en triples) y 1.8 pases gol en enero. Durante ese tramo, las dudas y quejas hacia el entrenador por parte de la fanaticada argentina se hicieron llegar ante la poca utilidad del cordobés. Uno de los tantos que salió a bancar este momento fue Chapu Nocioni, ex jugador y hoy parte de la cadena ESPN, en una entrevista en Super Mitre Deportivo: “Le va a ir muy bien, pero le va a costar adaptarse. Él tiene show y muchas condiciones, también la parte competitiva y es lo mejor que hay en el mercado”.
La premonición del Chapu fue acertada y su boom llegó en el segundo tercio de la campaña. Una mágica -y muy precisa- asistencia de Campazzo a Zeke Nnaji ante Los Angeles Lakers fue el comienzo de un febrero soñado. Tuvo cinco encuentros consecutivos donde llegó al doble dígito y, además, para bien de él y del equipo se logró compenetrar con diferentes compañeros en la cancha.
Sus registros en el segundo mes del año y el tercero de competencia crecieron a 8.4 asistencias y 2.7 asistencias, con un 44% en tiros de campo y un 38% desde el triple. Así fue como poco a poco se ganó el respeto de sus compañeros, tal es el ejemplo de Scott Brooks, entrenador de Washington Wizards: “Campazzo es un mini Jokic”.
Los últimos 13 cotejos que disputó no sobresalió por su faceta goleadora, pese a asentarse desde su tiro externo -en especial desde las esquinas-. Fue su mejor rol, el de conductor, el que se terminó de garantizar el protagonismo en Mile High Basketball. Su pico máximo fue hace 12 días, donde ante Charlotte Hornets alcanzó las 10 asistencias en el juego. A su vez, también se permitió el lujo de hacerse ver en defensa con su marca.
A tan sólo un juego de culminar la actividad en marzo, los números del Sheriff han sido dignos de elogiar: 3 puntos, 4.9 asistencias, 1.1 robos y 2.3 rebotes en 22.6 minutos de promedio en cancha. Ya es una fija dentro de la segunda unidad y, en varios casos, una garantía para combatir en los últimos minutos.
La semana pasada llegó el turno de la fecha límite de traspasos, lo que le trajo un alivio a Facu de cara al futuro cercano. La dirigencia de los Nuggets viró su mirada hacia el juego interno del equipo y, por ende, los tres nombres que llegaron vienen a potenciar esa zona. Como parte de la negociación, la franquicia radicada en el estado de Colorado se desprendió de RJ Hampton y Gary Harris. Éste último, incluso, gozaba de la titularidad y le restó, en un principio, la estancia de Campazzo en cancha. Pero las lesiones que contrajo lo llevaron a disminuir su rol dentro del plantel y, por ello, fue traspasado.
En ese sentido, la nómina de Denver quedó conformada en el back court con su base titular, Jamal Murray; el relevo Monte Morris; el escolta PJ Dozier y el basquetbolista argentino. Incluso, dado las características del juego de Denver y las necesidades en cada encuentro, la disponibilidad de Facu seguirá en ascenso.
La consolidación de Facu en la NBA en estos cuatro meses mostró un periodo de adaptación mental, físico y técnico por parte del cordobés. Se reinventó en base a las falencias del equipo y logró que el entrenador principal, Michael Malone, lo respalde cada vez con más minutos por su sacrificio, consistencia, solidaridad y valentía.
“Mi sueño era jugar en la NBA. Ahora quiero competir y mantenerme acá muchos años” supo decir en una de sus últimas entrevistas Campazzo. Con esta dedicación y aporte al equipo, seguro se lo podrá disfrutar por varias campañas.
Juan Ignacio Alburquerque
@JuaniA10
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