Una noche acalorada en la NBA respecto de cambios fuertes antes del 9 de febrero como fecha final. La salida de Kyrie Irving de Nets abrió la puerta de salida directa para Kevin Durant también. Si bien eran rumores de dicha posibilidad, todo quedó concretado simplemente en horas. El alero ya es nueva incorporación de Phoenix Suns para juntarse con Paul y Booker en un explosivo Big Three.
Brooklyn Nets tiene una idea clara de reestructurar más allá de todos los sinsabores que se generaron con Irving en los últimos tiempos. Su incomodidad dentro del plantel, la salida poco elegante de Harden, una llegada de Simmons que apenas fue bienvenida y un equipo, que en general, no muestra lo suficiente para el semejante potencial que tiene.
Dentro de ese combo aparece Kevin Durant para sacar la cara e intentar llevar a Nets bien lejos, pero difícilmente para un campeonato. Una franquicia que no supo arropar a sus estrellas y ni Irving ni Durant estuvieron cómodos ni lograron generar un buen clima desde su llegada. La temporada del alero es de gran nivel con 29.7 ppp, 6.7 rpp y 5.3 app además de un 55% de campo y 37% en triples.
Por otro lado, Suns era uno de los equipos que buscaba dar un golpe de impacto. Viene de fuertes decepciones, no podía concretar un traspaso a la altura ni rodear como esperaba a Booker. De hecho se rumoreó un paquete que incluía a Paul con tal de quedarse con los servicios de Irving. Finalmente envió a Cameron Johnson, Mikal Bridges, Jae Crowder, 4 primeras rondas de Draft sin protección (2023, 2025, 2027 y 2029) y un intercambio para 2028. Recibió a Durant y también a TJ Warren como recambio.
Un intercambio fuerte pero sin ser una sorpresa absoluta pensando en las aspiraciones de Durant, la salida de Irving, el mal clima en Nets y la chance de emigrar a un contendiente donde se sienta mejor rodeado y nuevamente favorito.
José Fiebig
@Josefiebig
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